La estrategia del gobierno federal para que las iglesias cristianas evangélicas prediquen la cartilla moral de la cuarta transformación, es un atentado al Estado laico para impulsar esta religión en México, consideró el PRD.
“El Presidente de la República ha decidido que el sector cristiano, los evangélicos, o una parte de ellos sea su Ejército para llegar a la ciudadanía con la Constitución moral”, comentó a El Sol de México, Ángel Ávila, miembro de la dirección nacional extraordinaria del PRD.
El líder nacional del PRD manifestó que el Jefe de Estado debe respetar la constitución: “no puede haber una religión oficial”.
Asimismo, le recordó a López Obrador que este es uno de los legados más importantes que dejó Benito Juárez, uno de los personajes emblemáticos de la historia de México y del propio titular del Ejecutivo.
“No puede haber medios públicos puestos a disposición de organizaciones religiosas como lo hizo el presidente en febrero, cuando el gobierno otorgó una concesión por más de 30 años a una organización evangélica. Es sumamente grave que no se respete el Estado laico”, dijo.
Ávila Romero exigió al gobierno transparentar el proceso de entrega y estudio de la cartilla moral ya que una religión no puede prosperar a través de una acción de gobierno.