El gobierno mexicano inició pláticas con la Unión Europea y Estados Unidos para el financiamiento del Plan Integral de Desarrollo de Centroamérica, inclusive la Corporación de Inversiones Privadas en el Extranjero del gobierno estadounidense (OPIC, por sus siglas en inglés) ya ha comprometido recursos para infraestructura en México. Una de las bases de las estrategias del gobierno federal para enfrentar el fenómeno migratorio reciente, es “transferir parte de los apoyos sociales que tiene en sus programas ancla, a los migrantes que deseen quedarse aquí en México”.
Lo anterior, fue informado por el Subsecretario de América Latina y El Caribe, Maximiliano Reyes Zúñiga, quien pidió a diputados entrar en contacto con los Congresos de El Salvador, Guatemala, Honduras y Estados Unidos para dar mayor impulso al Plan Integral de Desarrollo de Centroamérica, elaborado por la Cepal.
Durante su participación en la reunión de trabajo en San Lázaro, con las comisiones unidas de Asuntos Migratorios, de Frontera Norte y de Frontera Sur, el funcionario comentó que hasta ahora ha habido un empuje al Plan a nivel de poderes ejecutivos, pero “no hemos trascendido a los legislativos”.
“Nos ayudaría mucho que establecieran con sus contrapartes legislativas, tanto en los tres países centroamericanos como en Estados Unidos, un empuje y apoyo político, mismo que hasta el momento lo hemos tenido en los ejecutivos, pero no hemos trascendido a los legislativos correspondientes”, puntualizó.
El subsecretario explicó que el Plan Integral de Desarrollo, de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), tiene financiamiento internacional de dos fuentes: recursos gubernamentales y sociales. En el caso de México, la aportación es a través del Fondo Yucatán, que para este año tiene 2 mil millones de pesos. Señaló que el dinero del fondo es operado a través de la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AMEXCID), que cuenta con mecanismos robustos de transparencia.