/ domingo 21 de febrero de 2021

Con tortillas, tlacoyos y tamales, Mujeres de la Tierra combaten la violencia machista

Este colectivo ha devuelto la esperanza a las mujeres, pues con el coronavirus llegaron el desempleo, las humillaciones y otras formas de violencia doméstica sobre las que prefieren no ahondar

Mientras Alma enciende el fogón, Gris amasa maíz y Leticia lava verduras. La pandemia les robó el trabajo y las expuso a la violencia machista, pero con coraje armaron una cocina donde han vuelto a humear los sueños.

Pertenecen al colectivo Mujeres de la Tierra, una pequeña cooperativa que vende tortillas, tlacoyos, tamales y otras delicias de maíz a través de redes sociales.

▶️ Estas farmacias y plazas comerciales aplicarán pruebas Covid gratuitas en CDMX

El proyecto les ha devuelto la esperanza, pues con el coronavirus llegaron el desempleo, las humillaciones y otras formas de violencia doméstica sobre las que prefieren no ahondar.

La cocina funciona en la alcaldía Milpa Alta de la Ciudad de México, con vastos campos de nopal.

Con la venta de los alimentos, Alma, Gris, Leticia y otras tres mujeres buscan su autonomía económica y reflexionar sobre la violencia. La epidemia, y en particular los confinamientos, les hicieron ver que vivían con maltratadores.

"A veces nos deja mucho (dinero), a veces nos deja poco, pero somos muy afortunadas en trabajar todavía esto que nos da la tierra para producir y salir de nuestras violencias que vivimos en casa", dice Alma, de 31 años, tras preparar los platillos del día.

▶️Evolución | Generación Covid, más frágil que los Centennials

Múltiples violencias

Todas evitan dar sus nombres completos y se cubren el rostro. Razones no les faltan, pues México ha vivido en los últimos años un constante incremento en la violencia de género, acentuada durante la pandemia.

En 2020 se cometieron unos 940 feminicidios, mientras que las autoridades recibieron 260.067 llamadas de auxilio por violencia contra la mujer, el mayor número en el último lustro. El 10% de esas llamadas se registró en marzo, cuando arrancó el confinamiento.

Junto a un fogón todavía humeante donde poco antes cocinaba tlacoyos y tortillas, Alma reconoce esa realidad.

"Desafortunadamente todas hemos sufrido violencia, algunas de una manera, otras de otra manera (...). Es violencia psicológica, física, económica", dice en medio del olor a leña donde hierven los tamales.

▶️Especialistas de la UAEM recomiendan este tratamiento contra Covid-19

En marzo de 2020, cuando la epidemia llegó a México, las integrantes del colectivo quedaron desempleadas.

"Nos dieron las gracias", dicen de forma amable sobre su despido, un fenómeno que -según la Cepal- redujo de 52% a 46% la participación de las mujeres latinoamericanas en el mercado laboral entre 2019 y 2020.

Gris, de 34 años y con cuatro hijos, relata que ante el difícil panorama volvieron los ojos al oficio que conocen de sobra: "echar tortillas, tlacoyos, gorditas" al asador.

"Sí se puede"

El camino no es fácil en una economía que retrocedió 8.5% en 2020, su peor desplome desde la Gran Depresión, pero que según el FMI se expandirá 4.3% en 2021.

▶️Alteraciones en lengua, manos y pies, los nuevos síntomas del Covid-19

Las proyecciones incluso más pesimistas no logran sin embargo aplacar la alegría que se respira en esta cocina, animada con música y adornada con el color morado de las mazorcas que cosechan sus protagonistas.

"Nuestra autoestima a veces está por los suelos de tanto problema, preocupación, hijos, entonces de repente vienen con buenas noticias (...). Nos motiva a decir sí se puede, va a haber altas, va a haber bajas, vamos a vender a veces poco, a veces se va a componer", comenta Gris.

La confianza que han tejido ha hecho posible que estas mujeres se apoyen mutuamente para drenar su dolor, y sanarlo.

"Pensamos que va a llevar tiempo, que cada una agarra su paso", dice Chío. "Si nosotras decidimos organizarnos fue por nuestra necesidad y por las realidades tan fuertes que nos orillaron a decir, en un acto de desesperación, ¡basta!".

▶️ Mantente informado en nuestro canal de Google Noticias

Por lo pronto, Leticia, de 39 años, comienza a recoger los frutos de su tenacidad y el espíritu solidario de Mujeres de la Tierra.

"Me he sentido muy bien porque este proyecto me ha dado confianza, me ha dado seguridad económica y emocional. Me ha dado muchas cosas", reflexiona.




Te recomendamos el podcast ⬇️

Spotify

Apple Podcasts

Google Podcasts

Acast

Deezer

Amazon Music






Mientras Alma enciende el fogón, Gris amasa maíz y Leticia lava verduras. La pandemia les robó el trabajo y las expuso a la violencia machista, pero con coraje armaron una cocina donde han vuelto a humear los sueños.

Pertenecen al colectivo Mujeres de la Tierra, una pequeña cooperativa que vende tortillas, tlacoyos, tamales y otras delicias de maíz a través de redes sociales.

▶️ Estas farmacias y plazas comerciales aplicarán pruebas Covid gratuitas en CDMX

El proyecto les ha devuelto la esperanza, pues con el coronavirus llegaron el desempleo, las humillaciones y otras formas de violencia doméstica sobre las que prefieren no ahondar.

La cocina funciona en la alcaldía Milpa Alta de la Ciudad de México, con vastos campos de nopal.

Con la venta de los alimentos, Alma, Gris, Leticia y otras tres mujeres buscan su autonomía económica y reflexionar sobre la violencia. La epidemia, y en particular los confinamientos, les hicieron ver que vivían con maltratadores.

"A veces nos deja mucho (dinero), a veces nos deja poco, pero somos muy afortunadas en trabajar todavía esto que nos da la tierra para producir y salir de nuestras violencias que vivimos en casa", dice Alma, de 31 años, tras preparar los platillos del día.

▶️Evolución | Generación Covid, más frágil que los Centennials

Múltiples violencias

Todas evitan dar sus nombres completos y se cubren el rostro. Razones no les faltan, pues México ha vivido en los últimos años un constante incremento en la violencia de género, acentuada durante la pandemia.

En 2020 se cometieron unos 940 feminicidios, mientras que las autoridades recibieron 260.067 llamadas de auxilio por violencia contra la mujer, el mayor número en el último lustro. El 10% de esas llamadas se registró en marzo, cuando arrancó el confinamiento.

Junto a un fogón todavía humeante donde poco antes cocinaba tlacoyos y tortillas, Alma reconoce esa realidad.

"Desafortunadamente todas hemos sufrido violencia, algunas de una manera, otras de otra manera (...). Es violencia psicológica, física, económica", dice en medio del olor a leña donde hierven los tamales.

▶️Especialistas de la UAEM recomiendan este tratamiento contra Covid-19

En marzo de 2020, cuando la epidemia llegó a México, las integrantes del colectivo quedaron desempleadas.

"Nos dieron las gracias", dicen de forma amable sobre su despido, un fenómeno que -según la Cepal- redujo de 52% a 46% la participación de las mujeres latinoamericanas en el mercado laboral entre 2019 y 2020.

Gris, de 34 años y con cuatro hijos, relata que ante el difícil panorama volvieron los ojos al oficio que conocen de sobra: "echar tortillas, tlacoyos, gorditas" al asador.

"Sí se puede"

El camino no es fácil en una economía que retrocedió 8.5% en 2020, su peor desplome desde la Gran Depresión, pero que según el FMI se expandirá 4.3% en 2021.

▶️Alteraciones en lengua, manos y pies, los nuevos síntomas del Covid-19

Las proyecciones incluso más pesimistas no logran sin embargo aplacar la alegría que se respira en esta cocina, animada con música y adornada con el color morado de las mazorcas que cosechan sus protagonistas.

"Nuestra autoestima a veces está por los suelos de tanto problema, preocupación, hijos, entonces de repente vienen con buenas noticias (...). Nos motiva a decir sí se puede, va a haber altas, va a haber bajas, vamos a vender a veces poco, a veces se va a componer", comenta Gris.

La confianza que han tejido ha hecho posible que estas mujeres se apoyen mutuamente para drenar su dolor, y sanarlo.

"Pensamos que va a llevar tiempo, que cada una agarra su paso", dice Chío. "Si nosotras decidimos organizarnos fue por nuestra necesidad y por las realidades tan fuertes que nos orillaron a decir, en un acto de desesperación, ¡basta!".

▶️ Mantente informado en nuestro canal de Google Noticias

Por lo pronto, Leticia, de 39 años, comienza a recoger los frutos de su tenacidad y el espíritu solidario de Mujeres de la Tierra.

"Me he sentido muy bien porque este proyecto me ha dado confianza, me ha dado seguridad económica y emocional. Me ha dado muchas cosas", reflexiona.




Te recomendamos el podcast ⬇️

Spotify

Apple Podcasts

Google Podcasts

Acast

Deezer

Amazon Music






Finanzas

Citibanamex no tuvo a Luis Miguel, pero sí a Taylor Swift

En medio del proceso de venta, Citibanamex mantiene un gran optimismo por el mercado mexicano, especialmente cuando se trata de conciertos y eventos de entretenimiento en el país

Política

AMLO defiende demanda contra Ecuador en la CELAC

El mandatario ecuatoriano dice que no se arrepiente de haber irrumpido en la Embajada mexicana

Metrópoli

Xoco pelea arreglos que le debe Mitikah

Los habitantes del pueblo originario retomaron la batalla en tribunales para que Fibra Uno cumpla con los proyectos

Mundo

Buscan a mil 400 mexicanos tras escalada de violencia en Medio Oriente

Israel quiere dañar a Irán pero no busca una guerra total; sus aliados lo instan a mostrar moderación tras ataque con drones

Sociedad

CNTE toma la CDMX para negociar con AMLO

Mientras se realiza la mesa de diálogo con el presidente, un contingente de maestros de la CNTE marcha con dirección al Zócalo de la CDMX

Mundo

Arde el edificio de la Bolsa de Copenhague

Se desconoce el origen del incendio que consume el edificio, la policía acordonó una zona del centro de la capital para hacer las maniobras