El viernes parecía domingo o un típico día de Año Nuevo. Las calles de Culiacán lucieron en completa soledad luego de los hechos violentos del jueves.
Aunque se restableció el transporte público y las autoridades federales y estatales de seguridad anunciaron que la tranquilidad había vuelto, la ciudadanía prefirió permanecer en casa, sólo pocos salieron a trabajar.
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Luego de un día tomada por el crimen organizado, los culiacanenses pefirieron quedarse en casa, pues contrario a lo que declaraba el gabinete de Seguridad Federal y el gobernador del estado, Quirino Ordaz Copel, aún tenían temor y nerviosismo de salir a las calles en las que las balas y la sangre corrieron el día anterior.
Fue hasta las 10:00 de la mañana que el servicio de transporte publicó se restableció, sin embargo, hubo suspensión de trabajo en la mayoría de los corporativos y comercios, así como de clases.
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MIEDO
“Nosotros no queríamos venir a trabajar por miedo a que nos pasara algo inesperado, pero el patrón dio la orden de que agarráramos las rutas pero casi no hay gente, de 20 camiones que somos de la ruta La Lima-CU, sólo estamos cinco”, expresó Alberto, transportista.
Los camiones tardaban entre 30 y 40 minutos, una espera más larga de lo usual. para las rutas más abordadas.
En cuanto a los comercios del centro de Culiacán, eran contadas las tiendas que se encontraban abiertas. Farmacias, tiendas de venta de telas y supermercados eran los únicos abiertos.
Olga, quien trabaja en una reconocida tienda de telas, dijo que pese a lo sucedido y al miedo que tenía, se les informó que se debían presentar a trabajar normalmente.
“Tuvimos que venir con todo y nervio todavía, ¿y qué va hacer uno cuando tiene la necesidad de trabajar?”, dijo Olga.
Sobre la calle Domingo Rubí, una de las más transitadas por camiones urbanos y personas a pie, estaba sola.
“Está más solo que en domingo”, expresaban cadetes del Instituto de Ciencias Penales que hacían sus rondines de seguridad como normalmente se les asigna.
Sobre esa misma calle, una locataria de nombre Azucena expresó que “lo de ayer fue una muestra de todo el cochinero que hay en el gobierno y yo apoyo a Andrés Manuel López Obrador, porque el gobierno es la mafia más corrupta que hay y ayer nos dimos cuenta, qué mal que se tenga que llegar a andar incendiando carros y asustando gente porque el gobierno no hace su trabajo”. El flujo vial se vio más concurrido y los servicios de transporte privado como Bolt, Uber y Didi se restablecieron, así como también el servicio a domicilio de establecimientos de comida.