La población penitenciaria ha sido señalada como una particularmente vulnerable a contagios de Covid-19 debido al hacinamiento en el que vive. Al cierre de 2018, según el INEGI, existían 190 mil personas privadas de su libertad en cárceles federales y estatales, la mayoría en los estados de México, Ciudad de México y Jalisco. La CNDH ha identificado al menos 27 casos confirmados de la enfermedad y otros 23 son sospechosos en todo el país, en tanto que, como reportó este diario, sólo en el Penal de Puente Grande, Jalisco, hay 40.