Es hombre, tiene más de 60 años y generalmente sufre de hipertensión, diabetes o ambas. Este es el perfil de la mayoría de los mexicanos que están muriendo por complicaciones derivadas del nuevo coronavirus.
Y en cuestión de 11 días, tal vez menos dependiendo de su estado de salud, este paciente grave transita de los primeros síntomas a la muerte.
La información proviene de la base de datos sobre los casos de Covid-19 en México, que actualiza a diario la Secretaría de Salud federal.
De acuerdo con las cifras oficiales, hasta el corte del 3 de junio se habían contabilizado 11 mil 728 decesos por el virus y dos terceras partes de las víctimas eran hombres.
Este es un fenómeno que se replica en varios países del mundo. Las explicaciones puestas sobre la mesa para entender por qué el Covid mata más a los hombres van desde diferencias en la genética hasta los hábitos cotidianos.
Los especialistas señalan que los hombres pueden contar un sistema inmunológico más débil, pero también acumulan más grasa y se resisten más a ir al médico cuando tienen diabetes o hipertensión.
En cuanto a su edad, la mitad de las víctimas del coronavirus tenía más de 60 años y otra cuarta parte oscilaba entre los 50 y 59. En contraste, menos del 10% de los decesos correspondieron a personas menores de 40 años.
Las fallas viejas que el coronavirus desnudó
México es un país de obsesos, diabéticos e hipertensos, lo que agrava más la nueva enfermedad. El dato impacta: siete de cada diez personas que han fallecido por Covid-19 tenía al menos una patología previa.
De los casi 12 mil muertos que iban hasta el pasado 3 de junio, 42% tenía hipertensión, 38% diabetes, 27% obesidad, 7% un problema renal crónico, 6% alguna enfermedad cardiovascular; 5% una enfermedad pulmonar obstructiva crónica, 3% inmunosupresión y 2% asma (la suma no da 100% porque hay pacientes que padecían más de una comorbilidad).
Por otra parte, casi una de cada diez víctimas mortales eran fumadores frecuentes.
Para el epidemiólogo Óscar Sosa Hernández, las personas que tienen sus patologías controladas, toman sus medicamentos, monitorean su glucosa, hacen ejercicio y llevan una dieta balanceada, tienen más posibilidades de salir bien librados en caso de contagiarse de Covid.
El gran inconveniente, destaca Sosa, es que muchas de las enfermedades crónicas están completamente descontroladas en México e incluso hay gente que ni siquiera se sabía enferma, lo que incrementa la mortalidad. A él le ha tocado tratar con por lo menos tres pacientes fallecidos cuya familia ignoraba que eran hipertensos, diabéticos o prediabéticos.
“El problema en México es que la gente no está acostumbrada a la detección oportuna de enfermedades, y eso no es algo nuevo, es algo de siempre… El Covid-19 nos vino a enseñar cosas nuevas, pero en general son fallas viejas.
“La población tiene que recordar que debe detectar enfermedades a tiempo, hacer sus exámenes para la glucosa, revisar su colesterol, tener su peso en parámetros normales o evitar el sobrepeso y la obesidad. Y si eres paciente diabético o hipertenso, toma tus medicamentos, contrólate y ve de manera periódica a revisiones médicas”, recomienda el especialista.
Comerciantes, choferes y personal médico, los más afectados
La base de datos federal no aporta información sobre la ocupación de las víctimas mortales del coronavirus. Sin embargo, la base del Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica de la Ciudad de México sí cuenta con esta información, al menos en la capital.
Según estos datos, 18% de las víctimas en la ciudad se dedicaban al hogar, 13% eran comerciantes de mercados fijos o ambulantes, otro 13% estaban jubilados, 8% estaban desempleados y 5% eran choferes.
Destaca además un 3% de médicos, enfermeros y otro personal de salud que murieron infectados mientras atendían a pacientes con coronavirus.
El Sol de México rinde homenaje a sólo algunos que nos han dejado, aquí sus historias.
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