Las maquiladoras mexicanas se están convirtiendo en una oportunidad laboral para los migrantes que buscan llegar a Estados Unidos. Actualmente, hay cuatro mil 500 centroamericanas laborando en estas fábricas.
De acuerdo con datos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y del Servicio Nacional de Empleo, la mayoría de las maquiladoras que se encuentran en la frontera norte “le han entrado” al programa para contratar a migrantes que esperan una audiencia en cortes de Estados Unidos para solicitar asilo, o han sido deportados del vecino país.
En junio pasado, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció un programa para que las maquiladoras del norte del país contrataran a 40 mil migrantes.
Los centroamericanos están siendo contratados por las maquiladoras que les llegan a pagar hasta tres mil 300 pesos semanales, de acuerdo a su escolaridad y habilidades para desempeñarse como pulidores de muebles, costureras, secretarias o carpinteros.
Estos salarios son superiores a los que se ofrecen a egresados universitarios, quienes reciben salarios de hasta ocho mil pesos, según un estudio de la Universidad del Valle de México.
En Ciudad Juárez, por ejemplo, ya se ofrecen más de 12 mil empleos para migrantes, mientras que dos mil personas originarias de Honduras, Guatemala, Cuba, Ecuador y El Salvador, ya cuentan con un trabajo formal desde abril pasado.
En Tijuana la situación es similar, pues, según las cifras oficiales, un total de dos mil 500 migrantes ya cuentan con una visa de trabajo y de acuerdo a su escolaridad son incorporados a la industria de la ciudad, donde, según sus aptitudes reciben sueldos que van de los mil 700 pesos semanales a los 12 mil pesos mensuales.
Según la Dirección de Atención al Migrante, 44 empresas ofrecieron, solo en agosto, mil 500 empleos tanto para mexicanos deportados como centroamericanos retornados, aunque solicitaron, como requisito, contar con una visa de trabajo.
Aunque la OIM reconoce que será complicado convencer a muchos de los migrantes incorporarse a la vida laboral tanto de Tijuana como de Ciudad Juárez, porque si trabajaron en Estados Unidos sabrán que el sueldo allá es superior, destaca que la mayoría de las maquiladoras a las que ingresan les brindan beneficios implícitos como bonos, servicio de comedor y transporte.
Además de las maquiladoras, otras empresas de servicios, construcción e incluso call-centers que pueden aprovechar que la mayoría de los deportados hablan inglés, para contratarlos.