El secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, anunció ayer que México y Estados Unidos llegaron a cuatro acuerdos para reducir la migración de centroamericanos hacia Estados Unidos, y frenar la imposición de aranceles de cinco por ciento a los productos mexicanos, mientras que el ombudsman Luis Raúl González Pérez pidió no militarizar la frontera sur.
“Estamos satisfechos con el acuerdo y que nos gustaría que ciertas cosas funcionen sobre todo para nosotros. Agradecer muchísimo a las personas que nos han expresado su respaldo”, expresó en breve conferencia en Washington.
El canciller detalló que México se comprometió a desplegar la Guardia Nacional en la frontera sur y desmantelar las redes de tráfico de personas, mientras que EU retornará a México a quien cruce su frontera para pedir asilo.
Asimismo, aplicará la legislación para disminuir la migración irregular y aceptará que las personas de origen centroamericano residan en México, mientras regularizan su estatus en Estados Unidos.
Ebrard Casaubón se limitó a comentar que esta es una de las obligaciones de México, después de haber firmado el pacto de migración segura de Marrakech ante la Organización de las Naciones Unidas. En tercer lugar, la Unión Americana aceptó colaborar e invertir en el Programa de Desarrollo Integral para Centroamérica, para atender las causas y frenar el fenómeno migratorio.
Por lo que, el gobierno estadounidense mantiene su promesa de invertir más de 5 mil millones de dólares para fomentar el desarrollo económico y el empleo en la frontera sur de México, Guatemala, El Salvador y Honduras.
Y en cuarto lugar, prometieron que si las medidas anunciadas no dan resultados en un plazo de 90 días, regresarán a una segunda ronda de mesas de discusión.
Por su parte, el presidente Donald Trump tuiteó que México tomará medidas sólidas para detener la migración y que los aranceles quedan suspendidos de forma indefinida.
Más temprano, en México, el titular de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), Luis Raúl González Pérez, pidió no militarizar la frontera y anunció que convocará a los ombudsperson de Centroamérica para crear un protocolo de protección a migrantes.
“Yo debo de señalar que, así como condenamos que Estados Unidos no militarice la frontera sur de nuestro país, nuestra frontera norte, México no debe caer en la misma prospectiva”, exhortó.
