Como resultado de la pandemia por Covid-19, la Organización Internacional del Trabajo (OIT), estima que desaparecerán 6.7% horas de trabajo en el segundo semestre de este 2020, lo que equivale a 195 millones de trabajadores de tiempo completo.
Por tanto, la dinámica impuesta por el coronavirus traerá consigo una mayor crisis global económica y social en décadas, con efectos muy negativos en el empleo, la lucha contra la pobreza y la reducción de la desigualdad. Algún día, la emergencia sanitaria pasará. Volveremos a la movilidad y algo será seguro: viviremos en un país y en un mundo más pobre.
Así lo expuso la diputada Verónica Juárez Piña (PRD), al participar en el Foro virtul “De las dos sesiones de China: la Comunidad de Destino”, que organizó el Grupo de Amistad México-China de la Cámara de Diputados y la Revista “China Hoy”.
La legisladora jalisciense, destacó que en nuestro país, hasta el momento se han perdido alrededor de 600 mil empleos, según registros del IMSS.
Refirió que según el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), una estrategia para la respuesta socioeconómica urgente deberá sustentarse en 5 pilares críticos: protección de los servicios y sistemas de salud; protección social y servicios básicos; proteger empleos y pequeñas y medianas empresas y los actores productivos más vulnerables así como una respuesta macroeconómica y colaboración multilateral y cohesión social con resiliencia comunitaria.
Señaló que en este contexto, tendremos que aprender mucho del manejo de las naciones a la pandemia. Refirió que China logró controlar los contagios con mucha eficacia y con base en la experiencia de la epidemia de SARS en 2002, tomó medidas antes de que el brote alcanzara un máximo que pudiera desbordar su sistema de salud.
La coordinadora parlamentaria del PRD en San Lázaro, manifestó que la crisis de salud y económica mundial, abre la oportunidad para replantear la cooperación entre las naciones.
De México y China dijo que tienen una histórica relación bilateral. “Y ésta es una buena alternativa para ampliar los lazos no solo en materia comercial sino también turística, tecnológica, científica, educativa, de salud, agroalimentaria y, sobre todo, de fraternidad”.
Enhorabuena por estos gestos fraternales en medio de esta pandemia, que refleja una crisis de la humanidad pero que también, sin duda, abre una oportunidad para fortalecerla.
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