Petróleos Mexicanos (Pemex) canceló la compra de 700 carros tanque de ferrocarril para transportar destilados, diesel y gasolina de diferentes terminales portuarias a las refinerías, pese a que pagó un anticipo de 429 millones pesos a la compañía Ethan Gas Oil.
“En enero de 2017 se detectó la existencia de la subcontratación de un tercero sin autorización de PEMEX Logística por parte de Ethan Gas Oil contratada para la construcción de los carros tanque, por lo que con base en el análisis de la Dirección Jurídica se determinó llevar a cabo por medio de la administración de los contratos la terminación de las órdenes de compra”, reveló un documento realizado por Carlos Treviño Medina, ex director general de Pemex.
Durante septiembre del 2017 la Dirección Jurídica protocolizó un acta donde se da fe de que los carros tanque propiedad de Ethan Gas Oil se encuentran completos y en buenas condiciones, señala el documento realizado por la paraestatal, que fue entregado al gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
El análisis explica que se solicitó la intervención de la Dirección Jurídica para la recuperación del anticipo y demás diligencias que se consideren pertinentes para la salvaguarda de los intereses de PEMEX Logística.
La idea del gobierno de Enrique Peña Nieto era adquirir los carros tanques para trasladar productos refinados a las refinerías del centro del país, de una manera barata, segura y con menor impacto al medio ambiente, en relación con el uso del autotanque, explica.
Pemex Refinación (ahora Pemex Logística) solicitó la adquisición de 700 carros tanque de ferrocarril, con los cuales pretendió incrementar su flota de 525 a mil 225.
Con ello se buscaba satisfacer la demanda de destilados en las terminales que se abastecen vía ferroviaria, e incrementando el transporte de petrolíferos vía ferrocarril, para alcanzar un estimado de 22.5 millones de barriles anuales para 2015.
El análisis costo beneficio enviado a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), que en ese momento estaba Luis Videgaray Caso, expone que se pagaron 429 millones de pesos, así como estaban etiquetados más de mil 754 millones de pesos. La inversión total para 2019 es de 2 mil 512 millones de pesos.
“En los últimos años, el transporte de petrolíferos por poliductos ha perdido presencia frente a otros medios de transporte más costosos como consecuencia de su saturación -actualmente el 40 por ciento de los poliductos se encuentran al límite de su capacidad”, agrega el análisis costo beneficio.
Según el documento de Pemex Logística, el sistema de poliductos presenta múltiples cuellos de botella que limitan e incrementan el costo de operación.
“Se necesita implementar medidas que minimicen el costo de suministro considerando inversiones, costos de operación y de transporte, así como la disponibilidad y precios de los productos petrolíferos, al tiempo que maximicen el valor de la producción, minimicen el costo de suministro de la demanda, encontrando un balance óptimo entre producción y comercio exterior”, dice el análisis en manos de la SHCP.
La compra de los carros tanque se da en el marco de que la disponibilidad de combustóleo pesado para desalojo tendrá un decremento sustancial alrededor de 2019, siempre y cuando entren en tiempo y forma la conversión de residuales en la Refinería de Tula y Salamanca, ya que de haber retrasos en su entrada la opción que representa este proyecto atenuará el problema, recuerda.
“La demanda de gasolinas y diesel continuará creciendo y requerirá de transporte para el suministro oportuno, de ahí que de disminuir el combustóleo por Tula y Salamanca se utilizarían los equipos para destilados”, concluye.
