/ domingo 6 de agosto de 2017

Plan DN-III, una maquinaria precisa para ayudar

Por Emmanuel Gallardo

El Plan DN-III nació en el año1966 (lleva 50 años en operación), luego del desbordamiento delrío Pánuco y es un instrumento operativo castrense que establececómo deben actuar los organismos del Ejército y Fuerza AéreaMexicanos para realizar actividades de auxilio, rescate ysalvamento de población civil afectada por desastres, naturales oprovocados por el hombre.

El Plan DN-III, es implementado porla Fuerza de Apoyo para Casos de Desastre, un organismo militarpermanente y rotativo nacido a principios del 2000 que se activapara apoyar a los mandos territoriales del ejército, aquellosmilitares dispersos en todo el territorio nacional,  que puedanser superados por situaciones de desastre. El plan se activa porinstrucciones específicas del Secretario de la Defensa Nacional,Salvador Cienfuegos.

El acceso que da entrada a la puertaocho del Campo Militar número 1 es largo e impecable. Afuera delas instalaciones militares quedan la mugre, el caos, la basuraatascada a pie de alcantarilla y la impertinencia de losconductores de transporte público. Al pasar por el retén militarel aire cambia, se vuelve marcial. La pulcritud, el orden y ladisciplina se perciben en la mirada desconfiada de los PolicíasMilitares, y  en el estricto límite de velocidad de 30kilómetros por hora.

[caption id="attachment_718827" align="alignnone"width="650"]Foto: Ernesto Muñóz[/caption]

A menos de 500 metros de la entraday con el mismo orden de desfile de 15 de septiembre, 600 elementosde la Fuerza de Tarea de Emergencia Valle de México, personalmilitar de respuesta inmediata perteneciente al Plan DN-III, pasarevista. Ellos son los soldados capaces de llegar a una zona dedesastre en un tiempo no mayor a tres horas y es justo en estatemporada de lluvias, cuando todos los componentes del plan estánpermanentemente activados.

Se mueven por tierra y aire. Elcomponente aéreo lo forman Aeronaves de Ala Fija, Boeings 727 oaviones Hércules C-130, así como Aeronaves de Ala Rotativa;helicópteros MI-8, MI-17, MI-26. Dependiendo de la fase del plan,es la movilidad del personal que puede ser fraccionado dependiendode la necesidad específica de la situación dedesastre.

En todas las fases, el ComponenteTerrestre incluye un agrupamiento de ingenieros, un agrupamiento deservicios médicos, servicio de intendencia, Policía Militar ybinomios canófilos, núcleos de seguridad especializados enbúsqueda de cadáveres putrefactos y ahogados,  así comoparacaidistas y fuerzas especiales.

Todo funciona como un reloj suizo.Cada componente del Plan DN-III se sabe parte de una maquinariaorganizada, adiestrada y equipada para asistir a la población encaso de ser necesario. Sus rostros no se mueven en la formacióndentro de los distintos bloques de especialidades formados a lolargo de una explanada.

En México y másallá

Esta maquinaria humana y tecnológica, ha llevadoasistencia humanitaria más allá del territorio nacional. En el2005, luego de las profundas afectaciones causadas por el huracánKatrina, uno de los cinco huracanes másmortíferos en la historia de Estados Unidos, el ejército mexicanoaplicó el Plan DN-III  en dos contingentes que sumaron cerca de600 efectivos, 194 toneladas de víveres, agua y medicamentos.

Países como Haití, Indonesia, Ecuador, Honduras,Cuba y República Dominicana, han sido asistidos en distintassituaciones de desastre gracias al Plan DN-III. Tal vez por eso elrostro del Capitán primero de Infantería, Jonathan Arizmendi, del78 Batallón de infantería, se ilumina con una sonrisa al explicarsu sentimiento al ser un ejemplo para sus hijos:

“Es un orgullo. Siempre lo pensé cuando era niño,poder servir al país y ayudar a la población. Poder ver a lagente a la cara y que te digan gracias. Tengo dos hijos que sesienten orgullosos de su papá, que saben que está sirviendo alpaís. Quiero ser un ejemplo para que ellos sean buenos ciudadanosen un futuro”.

[caption id="attachment_718828" align="alignnone"width="650"]La pulcritud, el orden y la disciplina se perciben en la miradadesconfiada de los Policías Militares | Foto: ErnestoMuñóz[/caption]

La eficacia del personal militar para trabajar entodo lo necesario para resolver y manejar una situación dedesastre está calculada desde el momento de llegar a la zona ycrear un perímetro de seguridad por parte de Policías Militaresque son los responsables del orden en medio del caos. Ellos son losprimeros en llegar y dan oportunidad de que los demás componentesterrestres hagan sus respectivas labores.

El componente aéreo no nada más involucra eltransporte en aviones o helicópteros, meteorólogos militaresmonitorean constantemente las condiciones climáticas y establecen,entre otras cosas, la seguridad de los vuelos para establecer lospuentes aéreos: conexiones entre la áreas afectadas y los centrosde acopio cuando no hay acceso por vías terrestres paratransportar los víveres, ayuda humanitaria y al propio personalmilitar. Son bases seguras próximas inmediatas a las zonas dedesastre.

En el 2017 se han registrado 29 eventoshidrometeorológicos que han dejado afectaciones en BajaCalifornia, Campeche, Chiapas, Chihuahua, Coahuila, Estado deMéxico, Guerrero, Jalisco, Nuevo León Puebla, San Luis Potosí,Sonora, Tabasco, Tamaulipas, Oaxaca, Veracruz y Zacatecas. En cadauno de estos estados, el Ejército y la Fuerza Aérea Mexicanos hanaplicado el Plan DN-III.

Por Emmanuel Gallardo

El Plan DN-III nació en el año1966 (lleva 50 años en operación), luego del desbordamiento delrío Pánuco y es un instrumento operativo castrense que establececómo deben actuar los organismos del Ejército y Fuerza AéreaMexicanos para realizar actividades de auxilio, rescate ysalvamento de población civil afectada por desastres, naturales oprovocados por el hombre.

El Plan DN-III, es implementado porla Fuerza de Apoyo para Casos de Desastre, un organismo militarpermanente y rotativo nacido a principios del 2000 que se activapara apoyar a los mandos territoriales del ejército, aquellosmilitares dispersos en todo el territorio nacional,  que puedanser superados por situaciones de desastre. El plan se activa porinstrucciones específicas del Secretario de la Defensa Nacional,Salvador Cienfuegos.

El acceso que da entrada a la puertaocho del Campo Militar número 1 es largo e impecable. Afuera delas instalaciones militares quedan la mugre, el caos, la basuraatascada a pie de alcantarilla y la impertinencia de losconductores de transporte público. Al pasar por el retén militarel aire cambia, se vuelve marcial. La pulcritud, el orden y ladisciplina se perciben en la mirada desconfiada de los PolicíasMilitares, y  en el estricto límite de velocidad de 30kilómetros por hora.

[caption id="attachment_718827" align="alignnone"width="650"]Foto: Ernesto Muñóz[/caption]

A menos de 500 metros de la entraday con el mismo orden de desfile de 15 de septiembre, 600 elementosde la Fuerza de Tarea de Emergencia Valle de México, personalmilitar de respuesta inmediata perteneciente al Plan DN-III, pasarevista. Ellos son los soldados capaces de llegar a una zona dedesastre en un tiempo no mayor a tres horas y es justo en estatemporada de lluvias, cuando todos los componentes del plan estánpermanentemente activados.

Se mueven por tierra y aire. Elcomponente aéreo lo forman Aeronaves de Ala Fija, Boeings 727 oaviones Hércules C-130, así como Aeronaves de Ala Rotativa;helicópteros MI-8, MI-17, MI-26. Dependiendo de la fase del plan,es la movilidad del personal que puede ser fraccionado dependiendode la necesidad específica de la situación dedesastre.

En todas las fases, el ComponenteTerrestre incluye un agrupamiento de ingenieros, un agrupamiento deservicios médicos, servicio de intendencia, Policía Militar ybinomios canófilos, núcleos de seguridad especializados enbúsqueda de cadáveres putrefactos y ahogados,  así comoparacaidistas y fuerzas especiales.

Todo funciona como un reloj suizo.Cada componente del Plan DN-III se sabe parte de una maquinariaorganizada, adiestrada y equipada para asistir a la población encaso de ser necesario. Sus rostros no se mueven en la formacióndentro de los distintos bloques de especialidades formados a lolargo de una explanada.

En México y másallá

Esta maquinaria humana y tecnológica, ha llevadoasistencia humanitaria más allá del territorio nacional. En el2005, luego de las profundas afectaciones causadas por el huracánKatrina, uno de los cinco huracanes másmortíferos en la historia de Estados Unidos, el ejército mexicanoaplicó el Plan DN-III  en dos contingentes que sumaron cerca de600 efectivos, 194 toneladas de víveres, agua y medicamentos.

Países como Haití, Indonesia, Ecuador, Honduras,Cuba y República Dominicana, han sido asistidos en distintassituaciones de desastre gracias al Plan DN-III. Tal vez por eso elrostro del Capitán primero de Infantería, Jonathan Arizmendi, del78 Batallón de infantería, se ilumina con una sonrisa al explicarsu sentimiento al ser un ejemplo para sus hijos:

“Es un orgullo. Siempre lo pensé cuando era niño,poder servir al país y ayudar a la población. Poder ver a lagente a la cara y que te digan gracias. Tengo dos hijos que sesienten orgullosos de su papá, que saben que está sirviendo alpaís. Quiero ser un ejemplo para que ellos sean buenos ciudadanosen un futuro”.

[caption id="attachment_718828" align="alignnone"width="650"]La pulcritud, el orden y la disciplina se perciben en la miradadesconfiada de los Policías Militares | Foto: ErnestoMuñóz[/caption]

La eficacia del personal militar para trabajar entodo lo necesario para resolver y manejar una situación dedesastre está calculada desde el momento de llegar a la zona ycrear un perímetro de seguridad por parte de Policías Militaresque son los responsables del orden en medio del caos. Ellos son losprimeros en llegar y dan oportunidad de que los demás componentesterrestres hagan sus respectivas labores.

El componente aéreo no nada más involucra eltransporte en aviones o helicópteros, meteorólogos militaresmonitorean constantemente las condiciones climáticas y establecen,entre otras cosas, la seguridad de los vuelos para establecer lospuentes aéreos: conexiones entre la áreas afectadas y los centrosde acopio cuando no hay acceso por vías terrestres paratransportar los víveres, ayuda humanitaria y al propio personalmilitar. Son bases seguras próximas inmediatas a las zonas dedesastre.

En el 2017 se han registrado 29 eventoshidrometeorológicos que han dejado afectaciones en BajaCalifornia, Campeche, Chiapas, Chihuahua, Coahuila, Estado deMéxico, Guerrero, Jalisco, Nuevo León Puebla, San Luis Potosí,Sonora, Tabasco, Tamaulipas, Oaxaca, Veracruz y Zacatecas. En cadauno de estos estados, el Ejército y la Fuerza Aérea Mexicanos hanaplicado el Plan DN-III.

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