“Estamos planteando un gran acuerdo donde uno de los ejes principales sea el combate a la corrupción, al cochupo y al moche”, destacó el senador José Narro Céspedes (Morena), durante una jornada de protestas que realizaron ayer 30 organizaciones campesinas en la Ciudad de México, cuyo objetivo fue buscar el diálogo con el gobierno federal, el cual quitó a estas agrupaciones apoyos para dárselos de manera directa a los trabajadores agrícolas.
En respuesta a este movimiento que las agrupaciones campesinas también realizaron en gran parte del territorio nacional, el presidente Andrés Manuel López Obrador les advirtió: “Nada a través de intermediarios”.
“Eso no les gusta a algunos y andan haciendo su movimiento”, refirió el mandatario en su visita al municipio de Rodeo, Durango, donde aseguró que lo que antes era el Procampo ahora es Producción para el Bienestar, recursos que llegarán directo a ejidatarios y pequeños propietarios, al referirse a las organizaciones campesinas que en ocasiones fungen como intermediarias entre el productor y el gobierno.
“Así no llega o llega con moche y queremos que llegue completo”, comentó. Aseguró que lo mismo sucederá con la venta de maíz y frijol, pues la intención es que se compre directamente a los productores a un precio garantía de 14 mil 500 pesos por tonelada, directamente en los almacenes de Liconsa y Diconsa.
En la Ciudad de México, tras participar en la manifestación “Por la libertad, la justicia y el desarrollo”, que recorrió Paseo de la Reforma del Auditorio Nacional al Monumento de la Revolución, el senador Narro Céspedes expresó: “Nosotros estamos a favor de que los recursos no se esquilden ni se desvíen del objetivo que tienen que cumplir que es el bienestar de la población y el fomento productivo”.
A pregunta expresa sobre el diálogo que buscan con el gobierno federal, aclaró que aún “no hemos hablado todavía con el presidente, no ha habido diálogo todavía, ha habido comunicación epistolar y él ha expresado unos puntos de vista que nosotros respetamos”.
En cuanto al problema de corrupción que dicen que prevalece en algunos sectores, aclaró que la mejor forma de acabar con este problema es con la participación de la ciudadanía rural y del campo. Por eso es muy importante que el campo participe, continuó, “estamos planteando un gran acuerdo donde uno de los ejes principales sea el combate a la corrupción, al cochupo y al moche”.
Durante la marcha campesina, en la que se estima asistieron más de nueve mil personas integrantes de 30 organizaciones de El Campo es de Todos y el Congreso Agrario Permanente, sus participantes convocaron a la unidad nacional; demandaron una reforma al artículo 27 constitucional, el cual fue modificado durante el gobierno de Carlos Salinas; así como diálogo directo con el presidente López Obrador y que se coloque en la agenda nacional el tema del campo.
DESQUICIAN REFORMA
La manifestación de nueve mil campesinos estuvo precedida de bloqueos a la Bolsa Mexicana de Valores y el Senado de la República, en este último, a las 10 de la mañana, la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA) montó un campamento.
Una parte del contingente de la marcha partió del Auditorio Nacional sobre Paseo de la Reforma hacia la Columna de la Independencia, donde ya estaban algunos manifestantes y todos juntos, a partir del mediodía, marcharon hacia el Monumento a la Revolución.
Los trabajadores de la tierra que participaron en el movimiento expresaron sus demandas. Para Eleazar González y Leonarda, productores de las Chinampas de Xochimilco, manifestaron su preocupación por el tema de la inseguridad que viven los habitantes de esta alcaldía rural de la Ciudad de México, así como la falta de empleo.
Productores de Ixmiquilpan, Hidalgo, aseguraron que tienen problemas de escasez de agua en el Valle del Mezquital, donde las autoridades sólo prometen.
