Tras lamentar el asesinato de 15 civiles y un militar en la comunidad de Tepochica, Iguala, el presidente Andrés Manuel López Obrador reiteró el llamado a las comunidades para que abandonen las armas.
Durante la conferencia mañanera confirmó que el atentado fue perpetrado por una “célula de presuntos delincuentes” y dijo que se trata de inercias, producto del crecimiento de la inseguridad en los últimos años.
“No queremos enfrentamientos, no queremos la violencia. Vuelvo a hacer un llamado a que se abandonen las armas, no queremos que con la violencia se resuelvan los problemas. Hace falta la paz para el país, lo vamos a lograr, nada más que son inercias. Se dejó crecer mucho este problema y vamos a buscar resolverlo”, expresó.
López Obrador reconoció que la seguridad es una de las principales exigencias que le hacen los ciudadanos en sus giras de trabajo, incluso, ayer los gobernadores de Aguascalientes, Martín Orozco Sandoval, el de Zacatecas, Alejandro Tello, y el de San Luis Potosí, Juan Manuel Carreras, le pidieron apoyo en sus respectivos estados, a lo que les respondió que la Guardia Nacional llegará a sus comunidades.
De acuerdo al informe que recibió esta mañana en su junta con el gabinete de seguridad, viajaban en un convoy 14 personas y un cabo, quien iba al frente del vehículo con una ametralladora en mano, cuando se encontraron con integrantes del crimen organizado y comenzó el enfrentamiento.
“Muy lamentable lo del enfrentamiento en Guerrero, la pérdida de 14 seres humanos, muy lamentable esto, tengo el informe, fue un tema que se da, vamos a decir, producto de una rutina de vigilancia, de una patrulla del ejército con un grupo, con una célula de presuntos delincuentes y se encuentran frente a frente, le disparan a un cabo que va a delante con la ametralladora”, detalló.
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