ROMA, Italia.- Ocho millones deniños desaparecen cada año en el mundo, es decir, 22 mil cadadía. Este enésimo cáncer de la sociedad moderna, con datosimpresionantes que hacen reflexionar, fue recordado en ocasión dela Jornada Internacional de los niños desaparecidos, convocadadesde 1983 en recuerdo del pequeño niño estadunidense Ethan Patz,de 6 años de edad, de origen judío, secuestrado en Nueva York el25 de mayo de 1979.
Las estadísticas difundidastambién en Italia, de la organización “Missing ChildrenEurope” hablan de un menor desaparecido cada dos minutos (!) enel Viejo Continente, constituyendo así un auténtico ejército deniños invisibles de los cuales se han perdido losrastros.
Una verdadera calamidad, en granparte ignorada por los medios de comunicación y por lasinstituciones, que anualmente registra la desaparición en el mundode al menos ocho millones de menores.
Para contrastar esta plaga existeuna Red global administrada por el Centro Internacional para losNiños Desaparecidos y Explotados (ICmec), con sede en Alexandra,Virginia (Estados Unidos), que promueve una serie de iniciativas enlos países que, inexplicablemente, no consideran una prioridad labúsqueda de menores desaparecidos en la nada, ni llevan a cabopolíticas de prevención para combatir el fenómeno.
La indiferencia hacia el destinode estas jóvenes vidas o la incapacidad de protegerlas, noconcierne solo a los países pobres, si se considera por ejemploque en Europa desaparecen 270 mil niños y menores de edad cadaaño, o sea uno cada dos minutos(!). En Italia, no obstante laactivación de estructuras públicas y privadas especializadas enel problema, son más de 18 mil los niños de quienes nada se sabedesde 1974.
Los flujos migratorios de menoresno acompañados, que escapan de guerras y pobreza extrema, haagravado la situación a nivel general, convirtiendo a estospequeños prófugos en fáciles víctimas de organizacionescriminales que los venden en el mercado de la prostitución, deltráfico de droga o también del trabajo en negro, como ha sucedidoa miles de niños sirios reparados en Turquía. En Europa -segúnla “Europol”- se han perdido los rastros de 10 mil niños queemigraron solos.
El llamado del Papa
Un fuerte llamado a laresponsabilidad de todos fue lanzado en este contexto por el papaFrancisco durante la audiencia general de los miércoles en laplaza de San Pedro.
“Auspicio que las autoridadesciviles y religiosas –afirmó Bergoglio- puedan sacudir ysensibilizar las consciencias, para evitar la indiferencia defrente al drama de niños solos, explotados o alejados de susfamilias y de su contexto social, niños –subrayó- que no puedencrecer serenamente y ver con esperanza el futuro”.
