- Mohamed Lahouaiej Bouhlel estudió minuciosamente el escenariodos veces antes del ataque
PARÍS, Francia. (OEM-Informex).– El tunecino MohamedLahouaiej Bouhlel -autor de la feroz matanza del 14 de julio enNiza- preparó en forma minuciosa su atentado y estudió elescenario de la tragedia dos veces antes del ataque, según pistasreunidas por los servicios de inteligencia.
La Policía y los organismos de seguridad encargados de lainvestigación están terminando de recomponer el puzzle(rompecabezas) de la investigación para tratar de dilucidar eseataque que provocó 84 muertos y 202 heridos.
Los indicios reunidos hasta ahora sugieren que Bouhlelera eramenos solitario, improvisado e impulsivo de lo que pareció en unprimer momento.
Por una parte pudieron reconstruir el cronograma de los últimosdías. El 8 de julio retiró todo el dinero que poseían en elbanco y el 10 vendió su automóvil. Con parte de ese dinero pusoal día el seguro de sus hijos. El 11 alquiló el camión de 19toneladas que utilizó para arrollar a más de 300 personas, y el12 y 13 hizo dos reconocimientos de la Promenade des Anglais (Paseode los Ingleses) a baja velocidad para estudiar el trayecto queseguiría en la trágica noche del jueves 14 de julio. En variasocasiones detuvo su vehículo para estudiar algunasparticularidades del paseo que bordea el Mediterráneo.
El sistema de vigilancia digital de Niza -una de las ciudadesfrancesas con mayor densidad de cámaras de video- permitióreconstruir cada segundo de esos preparativos.
Gracias a explotación de los datos que contenía su celular,los Servicios de Inteligencia pudieron establecer la lista de suscontactos telefónicos. También determinaron que, 15 minutos antesde cometer la matanza, Bouhlel envió un SMS a un amigo diciendo:“Trae más armas, tráelas en 5 a C", escribió a las 22:27 horalocal. Según los investigadores, "5" significa cinco minutos, peroaún no lograron descifrar qué representa "C".
Minutos antes había caminado por el paseo marítimo ypresenciado los fuegos artificiales. Incluso se sacó una selfieque envió a su familia en Túnez, diciendo que estaba en Niza conamigos europeos para celebrar la fiesta nacional francesa, segúnrelató su hermano Jabeur, que se negó a compartir las imágenes."Parecía muy feliz, se reía mucho", se limitó a decir.
En función de las informaciones recogidas en las últimashoras, el Cuerpo de Operaciones Especiales de la Policía (RAID) yla Brigada de Investigación e Intervención (BRI) detuvo ayer auna pareja de albaneses sospechosa de haber provisto la pistolacalibre 7.65 utilizada al final de su recorrido para balearse conlas fuerzas del orden. A última hora de ayer hubo otros dosarrestos, con lo cual el número de detenidos ascendió a nuevepersonas. Su esposa Walid, en cambio, fue liberada por falta depruebas.
Una fuente cercana a la investigación aseguró, por su parte,que el terrorista envió otro mensaje afirmando que tenía"material". El destinatario del SMS es un intermediario que le hizollegar a Lahouaiej la pistola proporcionada por la pareja dealbaneses.
Después de esos descubrimientos, la Policía procuraestablecer, más que nunca, si Lahouaiej actuó solo o integrabaalguna célula terrorista. Las sospechas se intensificaron elsábado, después que el grupo jihadista Estado Islámico (EI)reivindicó el atentado y lo atribuyó a uno de sus "soldados".
Los investigadores no han logrado establecer, por el momento,cómo se produjo su “rápida radicalización”, según laexpresión empleada el sábado por el ministro del Interior,Bernard Cazeneuve. Los Servicios de Inteligencia especializados enla lucha antiterrorista dieron a entender que ese proceso seprodujo “en los últimos dos meses”. Pero no excluyen que en suactitud hayan jugado otros elementos. Entre 2003 y 2004, mientrasaún vivía en Túnez, fue atendido por el psicólogo ChemceddineHamouda, quien le prescribió tranquilizantes contra las crisisnerviosas provocadas por una depresión y un cuadro depsicosis.
Uno de sus vecinos explicó a la Policía que Lahouaiej habíaquedado muy afectado por un divorcio que no terminaba de aceptar yrepetía que su mujer "iba a oír hablar de él".
Después de haber asegurado que Lahouaiej no cumplía con lospreceptos del Islam, bebía alcohol, fumaba hashchich y solo leinteresaban la salsa y las mujeres, los vecinos comenzaron ahora amodificar sus testimonios. Numerosas personas de su barrio afirmanque “hace un tiempo” había dejado de beber alcohol, se dejóla barba y defendía posiciones extremistas. A los 200investigadores que trabajan en el caso les llama la atención, sinembargo, no haber encontrado en su casa, en su computadora ni en sucelular, ninguna referencia al Islam o al yihadismo.
Anoche, 72 horas después del atentado, más de 85 personascontinuaban hospitalizados. Sobre ese total, unas 50 están enestado de emergencia máxima, entre las cuales hay 18 que seencuentran “entre la vida y la muerte”, según las autoridadesdel Hospital "Pasteur".