El combate a los feminicidios en México ha fallado porque la violencia de género contra mujeres y niñas sigue siendo generalizada, las autoridades no investigan esos delitos y los responsables rara vez comparecen ante la justicia, sostuvo Amnistía Internacional (AI).
En su Informe Anual para las Américas 2019, AI indica que hasta ahora las autoridades tenían mil 006 investigaciones sobre asesinatos de mujeres, pero “no se disponen suficientes datos actualizados sobre feminicidios y violencia de género”.
De acuerdo con los datos oficiales del 2018, a 3 mil 752 mujeres se las consideraba víctimas de homicidio, a falta de investigaciones adicionales.
“Según las estadísticas oficiales sobre violencia de género correspondientes a 2016, 66.1 por ciento de las mujeres y niñas de más de 15 años habían sufrido violencia de género por lo menos una vez en su vida, y 43.5 por ciento de las mujeres habían sufrido violencia a manos de sus parejas”, indica el informe.
La organización defensora de los derechos humanos también puso sobre la mesa en su informe que México tuvo el año más violento de su historia moderna, con 35 mil 558 homicidios en 2019.
El documento destaca la cifra récord de homicidios diarios y critica que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador “continuó con las fallidas estrategias de seguridad utilizadas en el pasado”.
AI también reprobó tanto la creación de la Guardia Nacional, ya que es de carácter militar, como la aprobación de una “alarmante” ley sobre el uso de la fuerza.
“En su primer año, el nuevo gobierno tomó preocupantes decisiones respecto a la seguridad, incluida la creación de una Guardia Nacional formada principalmente por elementos militares", sostuvo.
Sobre migración, AI indica que México adoptó un enfoque basado en la seguridad, en el que utilizó a la Guardia Nacional para capturar a migrantes, y revela que las autoridades mexicanas detuvieron a 186 mil 750 personas en situación irregular y deportaron a 123 mil 239.
“De los deportados, el 98% procedía de Centroamérica, y casi la mitad de Honduras”, indica el informe, con datos de la Secretaría de Gobernación (Segob). Asimismo, “México fue el país más mortífero de la región para los periodistas, con al menos 10 homicidios en 2019”, sin que existan avances significativos en las investigaciones.
Como puntos positivos, AI puso énfasis en el liderazgo de López Obrador, quien nada más al tomar el poder "reconoció que México vivía una crisis de derechos humanos" y de inmediato tomó el caso Ayotzinapa "habló con los padres y creó una Comisión Especial, pero al día de hoy no tenemos resultados muy claros sobre la búsqueda" de lo estudiantes desparecidos en septiembre de 2014.
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