Durante este verano Europa ha registrado temperaturas récord, con ciudades como París con ondas de calor parecidas a las del norte de México. Datos de la NASA revelan que a partir de la década de los 60 cada vez más han sido las anomalias en temperaturas globales, siendo el 2016, hasta el momento, el año más caluroso del que se tenga registro. Mientras la actividad industrial y de transporte han crecido, así las emisiones de CO2, uno de los agentes catalizadores del calentamiento global.