La adolescente sueca Greta Thunberg, que ha inspirado un movimiento mundial contra el cambio climático, ofreció un mensaje muy claro en una audiencia en el Congreso de Estados Unidos:
No quiero que me escuchen. Quiero que escuchen a los científicos
La muchacha de 16 años, que inició las huelgas semanales en escuelas conocidas como "viernes para el futuro" para exigir medidas contra el calentamiento global, presentó un informe de 2018 del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático en la audiencia en lugar de un testimonio.
Instó a cambios rápidos y sin precedentes en la forma de vida de las personas para evitar que las temperaturas suban 1.5 grados Celsius para 2030.
"La gente en general no parece darse cuenta de cuán grave es la crisis", dijo Thunberg, instando a los legisladores a "unirse detrás de la ciencia" y tomar medidas, pidiendo que las personas traten el cambio climático "como la crisis existencial que es".
Thunberg fue una de cuatro estudiantes invitados a la audiencia conjunta del Subcomité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes sobre Europa, Eurasia, Energía y Medio Ambiente y el Comité Selecto sobre Crisis Climática, para conocer las opiniones de una nueva generación.
La activista ha estado en Washington desde la semana pasada para unirse a manifestantes estadounidenses e indígenas en apoyo a una manifestación climática global el viernes y presionar a los legisladores para que tomen medidas.
Además de la audiencia en el Congreso, Thunberg se reunió el martes con el expresidente Barack Obama, quien describió a la adolescente en Twitter como "uno de los grandes defensores del planeta".