EL CAIRO. A medida que pasan las horas se van conociendo nuevos datos de la operación en la que el pasado domingo murió el líder del grupo yihadista Estado Islámico (EI o Daesh), Abu Bakr al Baghdadi, y quedan al descubierto detalles como que sus paños menores delataron al terrorista más buscado del mundo.
En tanto que el presidente estadounidense, Donald Trump, confirmó que el portavoz de Daesh, Abu Hasan al Muhayir, también murió en la operación y subrayó que lo "más probable" es que hubiera reemplazado a Baghdadi.
Los detalles sobre el líder del EI lo contó en una cadena de mensajes Polat Can, un comandante de las Fueras de Siria Democrática (FSD), la alianza de milicias encabezada por kurdos, que facilitó a Estados Unidos la información de inteligencia para atrapar al fundador del EI.
De acuerdo con Polat Can, los combatientes kurdos se unieron a la CIA el 15 de mayo después de que Baghdadi fuera visto en la provincia siria de Idlib.
"Nuestra propia fuente, que había podido comunicarse con Baghdadi, trajo la ropa interior de Baghdadi para realizar una prueba de ADN y asegurarse (100%) de que la persona en cuestión era el propio Bagdadi", escribió Can en Twitter.
Estados Unidos tenía muestras de ADN en el archivo de Bagdadi, cuando detenido en 2004 en la ciudad de Faluya.
"Hace un mes, se tomó la decisión de eliminar a Baghdadi", dijo Polat Can. Pero la operación sufrió el "contratiempo" de la invasión turca del noreste de Siria, para expulsar a las milicias kurdas, a las que el gobierno de Turquía considera terroristas.
Donald Trump decidió entonces retirar la protección de las tropas estadounidenses a los kurdos pese a que habían sido aliados en la guerra contra el EI en Siria, y el 9 de octubre las tropas turcas, apoyadas por grupos rebeldes que operan en el noroeste del país, entraron en territorio sirio.