El dirigente opositor de Venezuela, Leopoldo López, de ninguna manera puede pedir asilo político en la embajada española en Caracas, donde se encuentra desde la semana pasada, ya que la legislación de España establece que sólo se puede solicitar cuando se está en territorio español.
El ministro español de Exteriores en funciones, Josep Borrell, agregó que López permanecerá en la residencia del embajador español en Venezuela, a donde llegó el pasado uno de mayo, pero sin que sea posible acogerse a la vía del asilo.
Reconoció que hay mucha confusión sobre las condiciones en que se encuentra el opositor venezolano, pero dejó claro que el asilo político sólo se puede pedir en España y no en la misión diplomática, por lo que esa norma también vale para el opositor venezolano.
Explicó que aunque la representación diplomática es "territorio español a efectos de inviolabilidad territorial, no se considera territorio español a los efectos de pedir asilo". “Imagínese la cantidad de gente que lo intentaría hacer en vez de arriesgarse a cruzar el Mediterráneo para pedirlo cuando llegue a España”, argumentó.
El jefe de la diplomacia española destacó que el caso de López es "la situación de una persona de acogida y protegida", lo que "impone una serie de normas lógicas de comportamiento".
Las declaraciones de Borrell a la prensa fueron hechas antes de la inauguración de la reunión anual del Consejo Científico del Real Instituto Elcano (el principal centro español de estudios internacionales), que el rey Felipe VI presidió en el Palacio Real de la Granja de San Ildefonso (Segovia, centro).
El dirigente opositor venezolano, su esposa Lilian Tintori y su hija se encuentran en la residencia del embajador español en Venezuela después de que el pasado 30 de abril fuera liberado por un grupo de militares de su arresto domiciliario, en el marco de la Operación Libertad, lanzada por el opositor Juan Guaidó.
El jueves pasado, el Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela emitió una orden de arresto contra López, que cumplía desde 2014 una condena de 14 años de prisión, aunque desde mediados de 2017 se encontraba en arresto domiciliario en Caracas.
