TikTok se encuentra en la mira de Estados Unidos desde hace un tiempo, pues el país busca prohibir el uso de la plataforma, a menos de que ésta corte relaciones con China, donde se ubica su casa matriz.
El proyecto de ley aprobado en abril con 352 votos a favor y 75 en contra supone una amenaza para la plataforma que ya cuenta con 170 millones de usuarios estadounidenses. Pero, ¿a qué se debe la ley de EU?
¿Por qué EU quiere bloquear a TikTok?
Estados Unidos no suelta las acusaciones contra TikTok porque considera que la plataforma permite a China, donde se encuentra la casa matriz ByteDance, espiar e influenciar a los usuarios estadounidenses.
Avril Haines, directora de Inteligencia Nacional de Estados Unidos, advirtió en una audiencia de la Comisión de Inteligencia de la Cámara de Representantes que no se puede descartar que el Partido Comunista Chino utilice la plataforma para esos fines.
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Una evaluación de amenazas hecha por la Comunidad de Inteligencia y publicada el lunes, señala que las cuentas de TikTok vinculadas con el gobierno chino habrían atacado a candidatos de los Partidos Republicado y Demócrata durante el ciclo electoral estadounidense en la mitad de mandato en 2022.
La preocupación de los funcionarios estadounidenses aumenta de cara a las elecciones que se llevarán a cabo en noviembre, en las que Joe Biden y Donald Trump podrían enfrentarse de nueva cuenta.
Por esta razón, este 24 de abril Joe Biden firmó la "Ley de Protección de los Estadounidenses contra Solicitudes Controladas por Rivales Extranjeros", que implica un ultimátum para que la plataforma corte relaciones con China.
¿Qué pasará con TikTok con la aprobación de esta ley?
La compañía china ByteDance tendría aproximadamente seis meses para vender la plataforma a una compañía estadounidense, de lo contrario, las tiendas de aplicaciones como Apple y Google no podrían ofrecer alojamiento web a TikTok o cualquier otra aplicación controlada por la empresa tecnológica.
No obstante, el camino todavía es incierto, pues cientos de usuarios han hecho llamadas al Congreso para que cancele el proyecto de ley, acusando que podría cortar su libertad de expresión.