Buenos Aires, Argentina.- El gobierno argentino desalentará los viajes a otros países donde circulen nuevas variantes del coronavirus y endurecerá los controles a quienes provengan de esos destinos, luego que se reportó el contagio de 44 personas que llegaron de un avión procedente de Cancún, Quintana Roo.
Se tratarían de estudiantes que habrían viajado a Cancún para celebrar su graduación, por lo que las autoridades sanitarias iniciaron la identificación y rastreo de los contagiados, a quienes pondrán en aislamiento y tendrán un seguimiento estricto.
Además, se extendió hasta el 9 de abril las medidas de distanciamiento social preventivas y obligatorias por la pandemia que incluyen mayores restricciones a los vuelos internacionales.
De acuerdo con un decreto publicado en el Boletín Oficial, se reducirán 30% las frecuencias aéreas a Perú, Ecuador, Colombia, Panamá y Chile, 20% las frecuencias con Brasil y 10% las frecuencias con Estados Unidos.
Las autoridades argentinas subrayaron que "muchos países de la región presentan un aumento de casos en las últimas semanas", y especificaron entre ellos a Chile, Uruguay, Paraguay y Brasil.
En el caso de Brasil y Estados Unidos, ambos destinos ya tenían una reducción estipulada a través de anteriores disposiciones gubernamentales.
Aunque las frecuencias aéreas argentinas con México y Europa mantendrán el 30 % de reducción que ya tenían pautadas, sin restricciones adicionales.
Se mantiene asimismo la suspensión de autorizaciones y permisos con relación a las operaciones de transporte aéreo de pasajeros en vuelos directos desde y hacia Reino Unido.
"Se deben desarrollar estrategias para disminuir el ingreso y mitigar la posibilidad de transmisión de estas variantes en nuestro país", indicaron las autoridades argentinas.
Entre las disposiciones añadidas se encuentra que la autoridad sanitaria tendrá el poder de establecer el testeo de los viajeros "para determinar que no sufren de Covid-19 previo al ingreso al país", así como otras medidas que estime pertinentes.
A su regreso los viajeros tendrán que presentar el test (PCR) negativo y hacer 7 días de aislamiento, con el objetivo de "minimizar la posibilidad de tener el ingreso de esas variantes y de tener su transmisión en el país".
"No se va a prohibir la salida (del país de los argentinos), porque eso tiene un impacto muy importante en personas que tienen que viajar de urgencia, por situaciones de trabajo o familiares, sino que se va a informar para que se elijan destinos donde no hay esas variantes, donde no hay casos y sobre todo estimular el turismo interno", precisó la ministra de Salud, Carla Vizzotti.