Monterrey - El ex Gobernador Jaime Rodríguez Calderón " El Bronco", pasó su primera noche preso en el penal que construyó durante su administración y que en principio se anunció con inversión de mil 300 millones de pesos.
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Detenido el martes por presuntos delitos electorales, Rodríguez Calderón quien espera su primera audiencia, cerró en 2019 el temible penal del Topo Chico, y construyó el Cereso donde fue llevado.
Se trata en realidad de una extensión adjunta del Cereso de Apodaca y que ha sido llamado Cereso 2. Ambos penales están al norte, en las afueras de la zona metropolitana en el municipio de Apodaca.
“El proyecto contempla el aumento de la capacidad instalada, a mil 560 personas privadas de la libertad, en cuatro módulos de 380 personas cada uno, y un módulo de alta seguridad de 52 personas privadas de la libertad”, reveló la administración de Rodríguez Calderón al publicitar su obra.
En el Cereso 2 de Apodaca se tienen visitas familiares y lo único que se permite es que el interno pueda interactuar una vez por semana y durante 15 minutos, con una sola persona, en alguno de los nueve locutorios disponibles, se explicaba a la prensa al hablar de las medidas contra el Covid.
Los espacios son cabinas con una mínima privacidad, para que personas charlen a través de una reja, sentadas frente a otra.
El viernes 7 de enero hubo disturbios en el Cereso 1 de Apodaca con saldo de 56 internos lesionados.
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En octubre de 2020 El Bronco inauguró canchas deportivas en el Cereso de Apodaca, y acorde a su estilo y lenguaje verbal, dijo en broma a un interno que fungió como portero en el tiro inaugural: "Sí lo paras te libero wey", lo que celebraron con risas los asistentes el evento.
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