Diversos sectores de la sociedad en Tapachula, Chiapas, lamentaron no haber sido escuchados por el gobierno federal y el Instituto Nacional de Migración (INM), al señalar que las estrategias implementadas para atender el fenómeno migratorio en la Frontera Sur eran erróneas y que lo único que conseguirían era un estallido social como el que se vive actualmente, donde los ciudadanos han empezado a actuar por propia mano.
El exdirigente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en Costa de Chiapas, José Antonio Toriello, dijo que con la participación de los llamados activistas promigrantes que dirigen las caravanas, prácticamente se agitó a las personas indocumentadas con el pretexto de buscar un amparo por un juez Federal que les permitiría movilizarse hasta la frontera Norte, ocasionando que los extranjeros rezagados en Tapachula copiaran el esquema violento, al grado de agredir a los elementos del INM y la GN sin el más mínimo respeto.
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Dijo que ante la situación, la ciudadanía exige atención luego que los bloqueos carreteros en la costa que han provocado pérdidas económicas millonarias en diversos sectores, por lo que pidieron mano dura para restablecer el orden, pero al no encontrar respuesta los mismos ciudadanos se han organizado para garantizar el libre tránsito, derecho que se plasma en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, tal como ocurrió hace unos días en Tonalá, donde algunos traileros enfrentaron a los migrantes para exigir abrieran la carretera.
“El objetivo es hacer respetar la Ley del INM sin permitir se pisotee la soberanía mexicana, para que los extranjeros que están por llegar a México no cometan estos mismos atropellos que van en prejuicio de toda la población, pues se sabe que aún existen casi 10 mil haitianos en Panamá que podrían llegar en los próximos días, señaló el empresario.
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“Ya no queremos que la gente extranjera vuelva a hacer disturbios en México y pedimos que la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) respete nuestros derechos y recomiende a los Consulados de Haití, Guatemala, Honduras y demás que los regresen a sus connacionales a sus países de origen, que ya pugnen por el famoso derecho de ‘no devolución’ por ser solicitantes de refugio de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR),es necesario que ayuden a cooperar con las autoridades mexicanas y no se conviertan en una piedra en el zapato, ya que apoyan a los extranjeros inmigrantes que vienen a hacer estos actos de vandalismo a nuestra patria”, concluyó.