Ferrari y Sebastian Vettel, quienes perdieron el liderato del Mundial de pilotos en Monza, por primera vez este año, deben reaccionar en el Gran Premio de Singapur, decimocuarta prueba de la temporada, en un trazado a priori.
Tras Spa y Monza, dos circuitos de características ventajosas para las Flechas de Plata, la Scuderia se encuentra sobre un terreno que le conviene más que el trazado urbano de Marina Bay. Pocas rectas, muchas curvas y una pista muy estrecha en algunos lugares: Vettel espera vivir el mismo fin de semana que en Hungría, donde se benefició de la ayuda decisiva del otro Ferrari de Kimi Raikkonen.
“En este momento, Mercedes está delante pero confío en las modificaciones que va a tener nuestro auto”, señaló el alemán. Vettel, a tres puntos sólo de Lewis Hamilton (Mercedes), posee el registro de triunfos en Singapur, con cuatro victorias. Una nueva primera plaza parece necesaria si no quiere ver peligrar su búsqueda de un quinto título mundial.
Deplorando la situación vivida en el reciente Gran Premio de Italia, donde nueve pilotos fueron sancionados con un total acumulado de 150 plazas en la parrilla de salida por infracciones técnicas, Chase Carey, el patrón de la Fórmula 1, indicó que es favorable a un cambio en el sistema de penalizaciones.