Mientras se realizaba la segunda jornada de búsqueda de la joven Pamela Gallardo en el kilómetro 12 de la carretera Picacho Ajusco, otro predio se convirtió en punto de interés, tras el hallazgo de un cuerpo, por lo que colectivos piden iniciar trabajos de rastreo en ese lugar.
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El jueves por la tarde, madres buscadoras del colectivo Una luz en el camino advirtieron sobre la localización de un cadáver al interior de un predio en Santo Tomás Ajusco.
De acuerdo con Jaqueline Palmeros, fundadora del colectivo, una llamada anónima las alertó sobre la posible presencia de un cuerpo en la zona.
“(Nos enteramos) por una llamada anónima que le hacen a una compañera del colectivo, le comentan que había restos en ese predio, es un predio que no es tan fácil accesar porque tienes que cruzar mucho terreno donde la hierba ya está crecida, que se presta para que haya nidos de víboras”, explicó.
“Se logró hacer un pozo de sondeo, donde salió el olor de putrefacción; sin embargo, los peritos nos sacaron y nos dijeron que no podíamos continuar porque era un predio privado e iba a quedarse en resguardo”, resaltó.
En entrevista con El Sol de México, Rosalida Sandoval Casares, madre de Leonardo Sandoval Casares, quien desapareció el 15 de mayo del 2022, explicó que el cuerpo del hombre localizado no corresponde a ninguno de los familiares de las madres buscadoras, por las características de ropa y altura.
“El cuerpo no es de ningún familiar de los colectivos o de madres independientes, el cuerpo es de una persona que enceraba carros en la base de la 39 de Santo Tomás Ajusco. Supuestamente era una persona en situación de calle y al parecer ahí murió”, indicó.
Sin embargo, solicitaron a las autoridades capitalinas entrar a la zona a realizar una búsqueda, debido a que en los cuartos aledaños donde localizaron el cuerpo detectaron un fuerte olor fétido.
“Hicimos un pequeño sondeo y al estar paleando la tierra llegó un olor fétido.
No estamos seguras, pero creemos que podríamos encontrar otros cuerpos, por eso queremos realizar otra búsqueda para descartar que no haya más cuerpos”, agregó.
La tarde de ayer, ingresó al predio la Fiscalía de Investigación Especializada en la Búsqueda (FIPEDE), la Fiscalía capitalina y el ministerio público de Tlalpan, así como el agrupamiento de Fuerza de Tarea “Zorros”.
En tanto, María del Carmen, madre de Pamela Gallardo, desaparecida desde noviembre de 2018, encabezó la segunda jornada de búsqueda en el Ajusco.
Los días 10, 11, 12 y 14 de julio, se reanudaron los trabajos en los que hallaron dos molares y el fragmento de una mano. Ayer también se localizó una falange, que de acuerdo con peritos, se analizará para confirmar si es de humano.
“Hasta ahorita llevamos 19 restos óseos, de los que ya teníamos de febrero para acá nos dieron un informe que no podían sacar confrontas (para identificar el ADN de las personas)”, resaltó.
“Los restos los hemos encontrado dentro de los montículos de tierra, por eso tenemos que cernir, porque han salido dentro de la tierra”, agregó.
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María acusó que a pesar de que se ha demostrado que en el predio hay restos óseos, la Fiscalía capitalina tarda en reanudar las búsquedas, además de no contar con las herramientas esenciales como palas, botes, carpas, brochas y cernidoras.
“No tienen el material suficiente para hacer excavaciones, no tienen el conocimiento de cómo se debe excavar”, resaltó.
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