POR. E. ESPINOsA Conocida como El Día de Rusia, dicha fecha esfestejada como la declaración de la soberanía nacional de laFederación de Rusia. Por ello, nuestro gran amigo, el embajadorEduard Malayan, abrió las puertas de la regia mansión pararecibir a más de 500 invitados que vistieron de pipa y guante paratan importante celebración. Vestido con su traje de gala, elembajador ruso, con su característica sonrisa, fue saludando acada uno de sus distinguidos invitados, quienes demostraban suafecto.
Mientras los asistentes recorrían los salones de la casa,lindas chicas y funcionarios de la cancillería invitaban a pasar atomar vodka, la bebida tradicional del país anfitrión. En elmomento más importante de la ceremonia se escucharón los himnosnacionales de México y Rusia, en presencia del subsecretario deRelaciones Exteriores, Carlos de Icaza, quien dijo entre otrascosas que la amistad de México y Rusia ha pasado la prueba deltiempo, destacando la importancia de la mutua voluntad paraalcanzar las metas deseadas de dos países que se han visto comohermanos.
Se escucharon enormes aplausos y un brindis con espumosos vinospor tal celebración. Al saludar al anfitrión, nos dijo reconocerla gran labor del El Sol de México y toda su organización,periódico amigo de siempre, mientras saludaba a importantespersonalidades, colegas del honorable cuerpo diplomático entre losque se encontraban el embajador de Palestina, que hacia gratacharla con su colega de Egipto y de Marruecos. Por otro lado, lasmuy queridas embajadoras de Vietnam, Le Linh Lanh, y Alena Gazurovade la República Eslovaca, los embajadores Julio Garro, de Perú, yJonathan Peled, de Israel. Gabriela Jiménez, Martín Olavarrieta,el embajador de Jordania, el embajador Sergio Ley, con sus colegasmexicanos los embajadores Martínez y González Rubio quedegustaban las ricas viandas preparadas para ese día. Losembajadores de El Salvador, Nicaragua y Panamá, Carlos deHabsburgo, con su esposa, quien invitaba a su próxima charla en elMuseo Franz Mayer, donde hablará de su antepasado Maximiliano deHabsburgo.
La embajadora de Polonia, Beata Wojna, conversando con JavierVega, de la Cámara de Diputados, mientras allá abajo en losregios jardines, otro grupo de amigos de Bulgaria, Pakistán eIrán se deleitaban saboreando ricos chocolates rusos. Y muchosmás que se quedaron bajo los rayos del sol, brindando por tanimportante fecha.