El modisto francés Julien Fournié firmó este martes un espectacular desfile en un teatro parisino al ritmo de la música de la película "Vértigo", todo un homenaje a las mujeres "vamp" en la Semana de la Alta Costura. Centenares de aficionados acudieron a festejar los 15 años de la "maison" Fournié en el teatro Mogador.
"Con esta colección quise devolver la alegría, la fantasía y la ligereza que tanto echamos en falta en la actualidad", explicó el creador en sus notas de presentación.
Los desfiles de la alta costura acostumbran a ser shows restringidos, para una clientela selecta. Pero el espectáculo de Fournié, con música y luces al nivel del concepto de la confección de los vestidos, hizo recordar la época dorada de Jean Paul Gaultier o Thierry Mugler de los años 80 y 90, cuando la moda era una fiesta compartida en París.
Las modelos empezaron rindiendo homenaje a las "femmes fatales" del Hollywood de los años 40, con profusión de transparencias de tonos negros, pequeños sombreros con lentejuelas colocados de lado en la cabeza y una gabardina beige estilo Laurent Bacall, pero cortada al nivel de la cintura.
Destacaban los zapatos "stilettos", de tacones vertiginosos, toda una proeza para unas modelos que desfilaban haciendo gestos glamurosos hasta descender al nivel de la pasarela y pasearse entre el público asistente.
Destacó la participación de la modelo Michaela Tomanova, embarazada de siete meses, enfundada en un vestido negro de gala hecho a partir de un arnés.
Fournié rindió homenaje a esa moda que empoderaba a la mujer con trajes chaqueta, faldas tubo y medias liguero. Pero con toques modernos: un escote vertiginoso en un vestido negro adornado con gasas fluroescentes.
Esa modernidad destacó en el desfile a mitad del show, que de repente invocó la música disco y a Shirley Bassey. Las siluetas se transforman, las lentejuelas ganan espacio y aparecen las grandes hombreras y los cortes al bies.
Fournié recurre al cuero, al tejido tejano, a las mangas sobredimensionadas y al estampado pantera. "La ropa puede ayudar a superar todas las angustias y a reivindicar su personalidad sin tabúes", proclama el diseñador, que acabó en brazos de sus modelos.