Fabricación de armas hechizas un hobbie para “El loco de la RB”

Por LEONARDO RODRÍGUEZ 

HERMOSILLO, Son. (OEM-Informex).- A pesar de las campañas de desarme y demás políticas que las autoridades han implementado para contener el tráfico de armas de fuego por calles de la ciudad de Hermosillo y el Estado de Sonora, un punto no atendido en su agenda es el que corresponde a las armas hechizas. 

En anteriores ocasiones se ha cuestionado a autoridades como el secretario del Ayuntamiento, Andrés Suilo Orozco, o al secretario de Seguridad Pública, Adolfo García Morales, respecto a la posible localización por parte de mandos policiales de puntos de fabricación de armas de fuego “hechizas” o de fabricación casera, instrumentos que no por ser en su mayoría de un tiro, son menos mortales.

A esta pregunta, las autoridades simplemente han manifestado que no se tiene conocimiento de esta clase de actividades en calles de la ciudad de Hermosillo, o bien, que se trata de incidentes aislados; sin embargo, existen personas que opinan lo contrario.

Una de estas personas, “El loco de la RB”, un personaje que, por “hobbie”, se dedica a elaborar armas de fuego, las cuales termina cambiando por otras cosas, en un completo desinterés por lo que ocurra o se haga al final con sus “creaciones”.

En un recorrido por una colonia conocida por su alto índice de delincuencia al Norte de la ciudad, se tuvo la oportunidad de establecer contacto con este personaje, quien, con sus debidas reservas aceptó contar a este medio el cómo, el porqué y el qué, de su pasatiempo elaborando esta clase de artefactos, así como el uso que a veces hace de ellos.

[caption id="attachment_418207" align="alignright" width="615"] Foto: El Sol de Hermosillo[/caption]

“El de la RB” inició comentando que la necesidad de portar un arma de fuego al andar en la calle fue la que lo llevó a ingeniárselas para conseguir una pistola, dada la falta de recursos para comprar una en el mercado negro, fue a partir de ese punto que inició la fabricación de esta clase de artefactos.

“Empecé a usarlas y a fabricarlas porque todo el tiempo me gustaron las armas y nunca pude tener dinero para comprarme una o se me dificultaba, desde que estaba morrito y andaba en la calle y de repente me nació a mí hacer mi propia arma y desde hace como 4 años yo ya no dependo aquí de los que portaban armas, sino que yo mismo las diseño”, aseguró.

DIVERSOS MATERIALES

Al igual que su nombre, “El loco de la RB” ocultó su rostro y sus brazos para no ser reconocido tanto por sus facciones como por la serie de tatuajes que cubren sus extremidades. De esta forma continúo con su charla, durante la cual mostró uno de sus últimos “trabajos”.

“Ésta, como puedes ver, en su tiempo fue una pistola de clavos marca Hilti, de las que usan los tablaroqueros, los eléctricos, sólo en una construcción se puede usar, pero en cambio mira lo que dispara ahora, éste es un tiro de fúsil 30/30, de los que usaba Pancho Villa en la guerra y todo eso, exactamente de esos que les llaman de carabina, en cambio ésta es mi carabina ahora, es una chulada de arma”, dijo mientras mostraba el otrora instrumento de trabajo.

El arma, propiamente funciona de una forma muy rudimentaria, el mecanismo, por llamarlo de alguna manera, es de forma manual, pues el tiro se monta por la parte posterior de la “pistola”, dentro de un tubo móvil, el cual después puede jalarse hacia a delante por medio de una adaptación que hizo con un pedazo de plástico y tela.

El propósito de dicha adaptación es el poder jalar el tubo hacia atrás con fuerza, lo cual, al momento de impactar el cartucho con una punta al fondo del arma, genera la explosión y la consecuente expulsión de la ojiva.

LOS CALIBRES

Al preguntarle sobre si ha fabricado armamento de calibres más grandes, indicó que el de la muestra es el de mayor tamaño que ha hecho, pero no descartó la posibilidad de elaborar algo de calibre superior, pues son sólo cambios mínimos en el tamaño de la tubería que usa como materia prima lo que se requiere para aumentar con ello el tamaño del cartucho a percutir.

“He hecho calibres desde un .22 hasta un .45 y este que ves es el más grande, que puede ser el de carabina 30/30, pero he visto yo escopetas 12, todo eso, lo cual, pues, son fáciles de hacer, es cuestión de nomás ver y robarte así como quien dice, el diseño”, aseguró.

Al cuestionarlo sobre el posible valor comercial del artefacto, el encapuchado dijo que esa podía “tirarla en 500 pesos” y que se la iban a “arrebatar” por el calibre de la misma, tema que lo llevó a recordar otros trueques que ha hecho a cambio de su mercancía con otra clase de delincuentes.

“Ahora ya no me preocupa andar buscando armas, ahora me cuido más de las que yo hago, porque son comerciales, se pueden… pues uno como loco pues cambia armas por drogas, dinero, joyas, incluso una vez hasta una chamaca me trajeron por una arma, de esas como les dicen, prostitutas, por una de éstas”, dijo con sorna el armero.

Al usar este último término, y cuestionarlo sobre si es o no un armero, “el loco de la RB” dijo no serlo, pues él las fabrica por diversión o para “hacer el paro” cuando alguna de sus amistades tiene problemas con la ley o bien con algún otro grupo de malvivientes, además de que, consideró, actualmente cualquier “malandrito” puede hacer trabajos que superen el suyo, lo cual, al mencionarlo, pareció recordarle sus inicios en esta vida de delincuencia, drogas y violencia en la que ha venido a parar.

“Nooo, pues ahorita cualquier chamaquito te arma una hasta mejor que ésta, ¿por qué?, porque aquí en el bajo mundo, como se puede decir, uno pues… ya no crece sobre lo que es, lo, lo del deporte, por ejemplo un campo de beisbol, sino que uno se va sobre las armas, las drogas, y todo lo que ve en la calle, y ahora pues cualquier chamaquito se cree cholo y pues, ve en lo que termina uno”, dijo con cierto dejo de lamento.

RECUADRO

Las armas de fuego por naturaleza son peligrosas, pero las de fabricación casera no sólo representan un riesgo para la víctima sino también para quien las utiliza, advirtió Carlos Pereira, de profesión armero.

“Se considera arma de fuego cualquier artefacto en el que se utilice pólvora para poder ser activada, ya sea vaciada, encapsulada o algún otra manera”, especificó.

En la actualidad el Código Penal para el Estado de Sonora no contempla como delito la portación de armas de fuego hechizas, sin embargo, si mediante un peritaje se determina que el artefacto dispara cartuchos o balas el proceso legal continúa su curso.

El profesional indicó que cualquier arma que no cumpla los estándares de calidad y medidas de seguridad que contempla la ley representa un riesgo para quien las utilice, ya que la recámara, lugar donde se aloja la bala que será disparada, puede explotar y el curso de la bala será impreciso.

Además detalló que en Internet hay una gran variedad de videos de ¿cómo elaborar armas hechizas o improvisadas en metal o plástico? incluso aquellas en las que utilizan químicos.

/RPE