La industria aérea mexicana continuará con limitaciones hasta que México recupere la categoría uno, la cual le fue retirada por la Administración Federal de Aviación (FAA, por su sigla en inglés), autoridad aérea de Estados Unidos, informó la agencia calificadora mexicana HR Ratings en un análisis.
En su documento, titulado “Aerolíneas Mexicanas”, la agencia indicó que mientras México no recupere la categoría perdida, el desarrollo de nuevas rutas, el aumento de frecuencias o el beneficio de uso de códigos compartidos entre México y Estados Unidos estarán restringidos, lo cual limitará en términos generales el crecimiento del sector aéreo nacional.
No obstante, la calificadora señaló que se tiene que reconsiderar la reconfiguración del espacio aéreo para continuar con las mejoras del sector.
Añadió que el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) operó arriba de su capacidad en el 2019, por lo que la migración de rutas comerciales y carga hacia el Aeropuerto Internacional Felipe ángeles (AIFA) y el Aeropuerto Internacional de Toluca (AIT) será de gran relevancia para el crecimiento de la industria.
“Consideramos que será muy importante monitorear la evolución de las rutas y frecuencias que cada aerolínea operará en el AIFA y AIT, así como sus factores de ocupación en estos
aeropuertos y su impacto en la rentabilidad de cada aerolínea”, indicó HR Ratings.
Respecto a los riesgos en el corto plazo, la agencia calificadora informó que, a pesar de que las empresas del sector iniciaron el 2022 en una mejor posición respecto al 2019, existen “riesgos materiales” que continuarán generando incertidumbre en la rentabilidad del sector aéreo.
Señaló que, en primer lugar, el precio de la turbosina, el principal componente del gasto (35.4% en promedio en el 2019 y 30.6% en el 2021), tuvo un incremento de 62% en el 2021 y en el primer trimestre del 2022 subió 107%.
En segundo lugar, indicó que la industria podría volver a experimentar problemas adicionales por el Covid-19, o retrasos en la reapertura de algunos mercados internacionales.
“Finalmente se presenta un escenario macroeconómico poco favorable, con un crecimiento moderado, elevada inflación y altas tasas de interés”, señaló.
Por otro lado, informó que durante la pandemia, las aerolíneas se enfocaron en mejorar sus estructuras de costos en dos áreas principales: flotas más eficientes (motores y configuración) y productividad en el más operativa, por medio de esquemas de remuneración variable.
“Esperamos que estas medidas, aunadas a incrementos en precios y mejoras en los factores de ocupación, permitan compensar parcialmente el incremento en la turbosina”, refirió.