Kraken, empresa de intercambio de criptomonedas, anunció este miércoles que recortará su plantilla mundial en un 30 por ciento, o unos mil 100 empleados, expuso que las difíciles condiciones del mercado que han paralizado la demanda de activos digitales este año.
El aumento de las tasas de interés y la preocupación por una desaceleración económica han hecho tambalearse a las criptodivisas, ya que los inversores se deshacen de los activos de riesgo, y las recientes quiebras se suman a la incertidumbre.
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"Desde el comienzo de este año, los factores macroeconómicos y geopolíticos han pesado en los mercados financieros", dijo la compañía.
Kraken dijo que la reducción llevará su plantilla total a donde estaba hace 12 meses, y que ha visto una caída en los volúmenes de negociación y menos registros de clientes.
La caída de FTX
La quiebra de FTX ha repercutido en todo el sector, dificultando la liquidez de las empresas con exposición a la que fue una de las mayores bolsas de criptomonedas del mundo.
Hace tres semanas, la plataforma con sede en Bahamas se declaró en quiebra tras haber llegado a estar valorada en 32 mil millones de dólares y podría tener más de un millón de acreedores en todo el mundo, aunque previamente había declarado ante un tribunal estadounidense que sus acreedores rondaban los 100 mil clientes.
Según expertos, lo más probable es que los usuarios afectados nunca recuperen sus fondos, dado que los depósitos no estaban garantizados- a diferencia de lo que ocurre en la banca tradicional- y no está claro cuánto dinero podría quedar para resarcirlos cuando se liquide la empresa.
FTX se había convertido en los últimos años en una de las plataformas de criptomonedas más relevantes del mundo, pero se vino abajo en apenas unos días después de que surgiesen dudas sobre su solvencia a raíz de varias informaciones, lo que llevó a muchos usuarios a apresurarse a retirar su dinero, dejándola sin liquidez y en busca de un rescate.
Según se ha sabido desde entonces, FTX habría usado miles de millones de dólares de sus clientes para financiar arriesgadas apuestas a través de su firma de inversiones Alameda Research, una práctica en principio ilegal si no contaba con el visto bueno de los usuarios.
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Por ese motivo, tanto las autoridades de Bahamas como las de Estados Unidos están investigando posibles delitos cometidos por la firma fundada por Sam Bankman-Fried, un empresario de 30 años que se había convertido en una de las figuras más conocidas del ámbito de las criptomonedas.
