El Servicio de Administración Tributaria (SAT) embargó las cuentas de la operadora de restaurantes Alsea, luego del adeudo por la compra de Vips a WalMart desde 2014.
En un comunicado enviado a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), Alsea dijo que este embargo es “indebido”, ya que el Tribunal Federal de Justicia Administrativa (TFJA) ordenó la suspensión de estos actos, así como del cobro del crédito en cuestión.
De acuerdo con el documento, Alsea, que agrupa a marcas como Burger King, Vips, Starbucks o Domino’s Pizza, interpuso en tiempo y forma un juicio de resolución exclusiva ante el TFJA, sin estar obligada a garantizar el crédito fiscal en las condiciones establecidas.
Una vez admitida la demanda interpuesta, puntualizó la compañía, el TFJA ordenó la suspensión de la ejecución y cobro del crédito impugnado.
“Aun cuando Alsea mantiene sus operaciones de manera regular, espera que en los próximos días el SAT cumpla la orden del TFJA sobre la suspensión de la ejecución y cobro del crédito impugnado, y ordene el levantamiento de los embargos que se mantienen de manera indebida”, refirió la empresa.
Los reclamos entre el SAT de Raquel Buenrostro y Alsea, que encabeza Alberto Torrado, comenzaron aproximadamente desde 2020, cuando la autoridad fiscal solicitó un pago de tres mil 881 millones de pesos por adeudos fiscales derivados de la compra de Vips a Walmart en 2014.
En febrero de ese mismo año, Alsea comentó que evaluaría todas las opciones legales pertinentes para impugnar la orden del SAT. Meses después dio a conocer que ya estaba en pláticas con el organismo para obtener una condonación de su adeudo.
De acuerdo con el Código Fiscal de la Federación, el SAT está facultado para realizar embargos preventivos en caso de tener un crédito fiscal que no esté garantizado por el contribuyente.
Sin embargo, previo a los embargos, el SAT debe notificar al contribuyente que existe un procedimiento en su contra.
Durante estos procesos, la autoridad también puede cancelar los sellos fiscales de las personas físicas o morales, con lo cual imposibilita al contribuyente a emitir facturas, entre otras cuestiones.