Se fortalecen en más de 20 mil puntos de contacto, en todo el país, las medidas de vigilancia epidemiológica para detectar cualquier brote de influenza aviar en la parvada avícola comercial de 600 millones de aves, más los 50 millones de la avicultura familiar en 5 millones de predios.
El hallazgo de un pato juvenil de ala verde, no representa un brote de esta enfermedad ni afecta el estatus de país libre. La vigilancia epidemiológica que opera en las 32 entidades federativas el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) es permanente los 365 días del año.
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“No es momento de vacunación contra el virus AH5N1. Solo se considera la notificación obligatoria de casos confirmados en unidades de producción”, afirmó el maestro Roberto Navarro López, director de la Comisión México-Estados Unidos para la Prevención de la Fiebre Aftosa y otras Enfermedades Exóticas de los Animales (CPA) del Senasica.
"Estamos muy bien preparados en Senasica. En cada estado de la República tenemos un Grupo Estatal de Emergencia en Sanidad Animal. Tenemos 32 Grupos de Emergencia en el país, y en cada estado un Centro de Operación de Emergencia Sanitaria, que coordina el representante de Agricultura, el de Senasica, nuestro personal de la CPA, los gobiernos de los Estados y los productores”.
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La bioseguridad, que debe ser permanente, es la mejor protección contra la influenza aviar. Y sí no es esta enfermedad hay muchas que nos pueden afectar de manera severa. Hay que cumplir con todas las medidas para que sus granjas se mantengan en buenas condiciones, subrayó el doctor Navarro.
Afirmó que es una obligación de los avicultores proteger sus parvadas, porque son su patrimonio. Cada granja por obligación debe tener un médico veterinario responsable autorizado, que haya tomado un curso de especialización para ver todo lo referente a la sanidad de las aves, que certifica el Senasica por dos años.
Ellos deben avisar a la CPA, de manera inmediata, cualquier incremento en la mortalidad de aves o bien de baja en su producción de huevo, dijo a El Sol de México.
Pero se tiene el registro nacional oficial de 81 por ciento de las granjas protegidas, que es bueno.
Por eso lanzamos una campaña “Cerrando Puertas y Ventanas”, para que los avicultores tengan máxima seguridad. Las aves silvestres de vida libre no deben entrar a sus granjas ni en contacto con sus pollos o sus gallinas.
Se trata de que en las granjas se cierren puertas y se tenga el cuidado de que sus mallas pajareras estén en buen estado, que sus techos no tengan agujeros o resquicios por donde ingresen aves que pueden estar infectadas, dijo el doctor Navarro.
También el instalar baños, para que los trabajadores antes de entrar a los sitios donde se encuentran las aves, tomen un baño y dejen su ropa de calle y utilicen ropa de la granja para sus labores y así, evitar contagios “Las personas podemos transportar muy fácilmente los virus”.
Se monitorean aves migratorias
En entrevista explicó cómo se hacen los hallazgos de aves migratorias para examinarlas en el marco del Programa de Vigilancia Activa y en el Programa de Vigilancia Pasiva, que es cuando nos reportan que las aves se están muriendo y vamos a revisar.
Y la Vigilancia Activa es cuando vamos a vigilar, a monitorear aves sanas para saber si son portadoras de algún virus como el de la influenza aviar.
“Sabemos que todas las aves migratorias acuáticas, principalmente los patos son portadores del virus de influenza aviar. Pueden tener muchos virus de influenza de todo tipo, pero los que nos interesan son los que pueden ser patógenos para las aves y las personas, en este caso es el H5N1”, precisó.
Sabemos que en Estados Unidos y Canadá es donde se reproducen. Al inicio de septiembre, inicia la migración al sur del continente. Primero con los patos juveniles. Y en octubre, vuelan los patos adultos. Sabíamos que teníamos que encontrar patos juveniles. De hecho, el positivo fue éste.
Nuestro personal de campo también vigila los entornos ecológicos. Este año ha sido de sequía muy fuerte para México y los esteros y humedales no tienen mucha agua. Nos concentramos en puntos donde sí hay agua y llegan estas aves.
El hallazgo fue en un lugar que se llama el Estero de Becerra, en Tototlán. Ahí se capturaron 30 individuos con redes especiales. Se llevan al Laboratorio se ven edades, su condición física, sí es macho o hembra. Se va a una base de datos y se le toma una muestra de su tráquea y de su placa.
Eso se manda a nuestros laboratorios especializados en busca de virus de influenza. Y uno de ellos, un cerceta de ala verde, macho, en muy buenas condiciones físicas, dio positivo.
Y aunque los virus son de alta patogenicidad a los patos no los afecta; pero a las aves domésticas, sí es muy peligroso.
Con estos estudios, lo que se hace es alertar a los avicultores y hay muchos en la zona, para que refuercen sus medidas de bioseguridad.
E hizo esta aclaración el doctor Navarro: “Los patos no se meten a las granjas. Lo que sucede que en donde están los patos, hay otras aves como los zanates, que se pueden infectar donde están los patos. Y ellos sí entran a las unidades de producción y pueden llevar la enfermedad”.
Entonces, ahí se puede desatar un brote con las gallinas, con el estiércol de las gallinas, con las jaulas, con las personas que ahí laboran. Los avicultores son los responsables de cuidar su patrimonio con medidas de bioseguridad. Eso es muy importante.
También refirió a EL Sol de México, que en Estados Unidos hay indemnización a los productores cuando se afectan, pero aquí en México no existe ese tipo de indemnización y son los productores, como es una actividad económica importante, que tienen que proteger su inversión con medidas de bioseguridad que en Senasica, nosotros certificamos.
Insistió el doctor Navarro que se requiere de “muchísimo cuidado en esta actividad avícola”.
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Y respecto a otras medidas de bioseguridad, dijo: “Tenemos como país una condición de libre de H1N5, publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF). Y el que encontremos estos casos en aves silvestres, incluso en aves de traspatio no afecta la condición de libre”.
Sí se llegara a presentar en granjas se tienen que hacer acciones de control como se hizo el año pasado y principios de este 2023 y recuperar la condición sanitaria, enfatizó.