El paradero ubicado en la Central de Abasto de la Ciudad de México es la terminal de transporte público en la que la policía capturó a más presuntos delincuentes entre 2018 y 2022 con un total de tres mil 575, seguido del de Buenavista, con tres mil 305.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), obtenidos vía transparencia, los detenidos en estos dos Centros de Transferencia Modal (CETRAM) representan 28.1 por ciento del total de aprehensiones en 39 paraderos.
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La información reveló que en los últimos cinco años, 24 mil 416 personas fueron detenidas por diversos delitos en estos puntos en los que transporte público y concesionado como el Metro, autobuses, taxis, entre otros, están conectados.
Fue 2019 el año con más aprehensiones al sumar seis mil 110 personas, mientras que 2022 fue el que menos registró con tres mil 465.
La Secretaría precisó que las más de 24 mil detenciones ocurrieron en un radio de 400 metros a la redonda de cada Centro de Transferencia Modal.
Pero los paraderos de la Central de Abasto y Buenavista no fueron los únicos que rebasaron las más de mil aprehensiones, pues el de Pantitlán tuvo mil 732, mientras que el de Metro Zapata, mil 599.
El CETRAM ubicado en la calle Nezahualcóyotl, cerca del Metro Pino Suárez, tuvo un acumulado de mil 455 y el del Metro Puerto Aéreo, de mil 331.
En cambio, el paradero que menos reportes de aprehensiones registró es el ubicado en el Metro Rosario, con 58.
La SSC reportó que cinco los ilícitos concentraron 63.1 por ciento de los más de 24 mil registrados en cinco años y los cuales son robo a negocio con violencia, robo a transeúnte, posesión de droga, lesiones culposas y abuso sexual.
El crimen por el que más detenciones hubo en los CETRAM fue el robo a negocio sin violencia, con ocho mil 971.
Los operativos constantes de la policía capitalina, en ocasiones con binomios caninos, permitieron remitir al Ministerio Público a mil 988 pasajeros en posesión de droga. Las aprehensiones por lesiones culposas sumaron mil 298.
Los detenidos por abusos sexuales en los paraderos sumaron mil 216 y tuvieron un incremento entre 2021 y 2022 al pasar de 200 a 211, pero las cifras son menores a los 361 de 2019.
Durante estos cinco años, el número de personas aprehendidas disminuyó, ya que pasó de 5 mil 655 en 2018 a 3 mil 465, lo que representó una baja de 38.7 por ciento.
ZONAS INSEGURAS
El Sol de México recorrió el CETRAM de Pantitlán, que tiene una afluencia de más de un millón de pasajeros diariamente y 21 andenes para abordar autobuses, vagonetas y microbuses.
Debido a las obras de rehabilitación de la Línea 1 del Metro, la situación en el lugar es más complicada para los usuarios por el arribo de más camiones de la Red de Transporte de Pasajeros que prestan servicio emergente.
Aquí, cientos de puestos semifijos de comida, dulces, accesorios telefónicos, ropa, entre otros giros, que impiden un buen tránsito entre los estrechos pasillos que hay representan un riesgo para los usuarios, principalmente por las noches en las que algunos locales cierran, por lo que hay espacios oscuros y solitarios.
La SSC aplica allí, como en otros paraderos, el operativo “Pasajero Seguro” a cargo de policías bancarios e industriales y mantiene las acciones de apoyo a la ciudadanía y patrullajes a pie con apoyo de “Kratos”, unidad canina especializada en la detección de explosivos.
El paradero de Buenavista es otro paradero con gran afluencia de usuarios debido a la conexión de las Líneas 1, 3 y 4 del Metrobús, las terminales del Tren Suburbano y la Línea B del Metro.
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En un recorrido por la estación Buenavista del Metrobús, ubicada sobre Avenida Insurgentes Norte, había al menos seis vigilantes, dos de ellos en los torniquetes de entrada y el resto repartido en el lugar.
En la terminal de la ruta 4, que conecta con la estación Pantitlán del Metro, cuatro policías resguardaban a los pasajeros.
Durante el día, las calles aledañas al CETRAM Buenavista, cercano a Tepito y La Lagunilla, son transitadas, pero por la noche la situación cambia, pues hay sitios con poca iluminación y en los que pasa poca gente, lo que puede ser aprovechado por los delincuentes.
