En apenas ocho meses de 2022, personal de la oficina en México de Artículo-19 ha sido acosado, hostigado o agredido en al menos 18 ocasiones, lo que representa un constante riesgo para quienes trabajan en el país, advirtió la organización especializada en la defensa de los derechos humanos.
De acuerdo con un conteo propio, que fue expuesto este jueves en una conferencia de prensa en la que alertaron sobre este escenario, las situaciones de riesgo que ha enfrentado su personal van desde la toma de fotografías por parte de sujetos desconocidos a domicilios de trabajadores de Artículo-19, hasta amenazas de muerte a personal directivo.
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En evento de este jueves, Quinn Mckew, la directora ejecutiva de la organización a nivel internacional, señaló que los ataques contra el personal de la oficina mexicana demuestran la influencia que tiene la organización al denunciar las violaciones de derechos humanos que sufre el gremio.
Sin embargo, alertó que estas amenazas y el acoso no sólo provienen de lo que llamaron poderes fácticos, es decir, el crimen organizado, sino del poder político, siendo este uno de sus principales agresores.
Principalmente, lamentan, que las amenazas en su contra acrecentaron luego de que el 31 de marzo de 2021 el presidente Andrés Manuel López Obrador arremetió contra la organización en su conferencia matutina, donde los acusó de estar financiados por parte del gobierno de Estados Unidos y ser parte del “movimiento conservador”.
En esa ocasión, el mandatario federal se lanzó en contra de la organización porque el gobierno de Estados Unidos emitió unas recomendaciones a favor de la libertad de expresión en México y en las que acusó a Sanjuana Martínez, directora de Notimex, de coordinar ataques contra periodistas. Las descalificaciones en contra de Artículo-19 surgen porque en su informe la administración estadounidense usó a la organización de fuente.
Fue entonces cuando, aseguran, crecieron las agresiones, el hostigamiento, las presiones, el espionaje y las amenazas en contra del personal que trabaja en la oficina mexicana.
“Solo en ese año, además de esas embestidas del poder, nuestra oficina ha sido objeto de por lo menos 18 ataques, entre los que destacan: procedimientos de acoso judicial y administrativo, amenazas de muerte, amenazas contra la integridad de nuestro personal, campañas de desprestigio (y) ataques digitales”, acusó Leopoldo Maldonado, director de Artículo-19 en México.
El 4 de marzo de este año, por ejemplo, sujetos desconocidos estuvieron por varios minutos en la puerta de la habitación de una integrante de la organización durante un viaje de documentación en Baja California.
Un mes después, el 5 de abril, el día que la organización presentó su informe anual de labores, Leopoldo Maldonado recibió una amenaza de muerte. Ese mismo día, el Servicio de Administración Tributaria hizo un requerimiento a la organización, lo que se entendió como una presión fiscal por parte del gobierno federal.
Entre el 6 y el 15 de abril, la organización sufrió varios intentos de acceso no autorizado a cuentas que administran el sitio de Archivos de la Represión, el cual es un proyecto que recoge documentos y fotografías relativas a la represión y violencia por parte del Estado mexicano entre 1950 y 1980, de donde finalmente se lograron borrar más de mil 600 evidencias de violaciones de derechos humanos.
Para el 15 de julio, un miembro de Artículo-19 denunció que sujetos desconocidos tomaron fotografías fuera de su domicilio e increparon a su pareja sentimental. Tres días después, el 18, al salir de su casa se percató que una de las chapas de seguridad había sido dañada.
En un viaje de documentación a Veracruz entre el 12 y 15 de agosto, una persona desconocida permaneció de manera intimidatoria fuera del domicilio donde integrantes de Artículo-19 entrevistaban a un periodista. Al día siguiente, en dos ocasiones sujetos desconocidos abordaron a un consultor de la organización para pedirle su número telefónico mientras éste hacía su trabajo.
Lo mismo hicieron policías estatales, quienes sin consentimiento tomaron fotografías de los integrantes y consultores de Artículo-19 mientras se encontraban documentando durante su viaje.
Un mes después, el vehículo de un integrante de la organización fue parcialmente incendiado mientras estaba estacionado en la colonia Roma de la Ciudad de México. Destaca que mientras su automóvil era vandalizado, el miembro de Artículo-19 atendía al requerimiento de una autoridad ministerial.
Apenas siete días después, el 29 de septiembre, un vehículo de la Secretaría de Marina permaneció a las afueras de la oficina de Artículo-19 en la capital del país, coincidiendo con la hora de entrada del staff.
Estas son sólo una de los ataques e intimidaciones que ha sufrido el personal de la organización de defensa de la libertad de expresión entre marzo y octubre de este año, aunque también ha habido descalificaciones frontales por parte de autoridades, intento de acceso a cuentas de correos electrónico y phishing.
Lo que se da, además, en un contexto en México en el que agreden a un periodista atacado cada 14 horas y en el que han asesinado al menos 12 colegas derivado de su labor como comunicadores. Hecho que ha provocado que no sólo Artículo-19, sino organismos internacionales como la Organización de las Naciones Unidas y Reporteros Sin Fronteras llamen al gobierno del presidente López Obrador a tomar acciones.
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