Al publicarse este jueves en el Diario Oficial de la Federación (DOF) entra en vigor el Plan de Gestión a Largo Plazo
para controlar el Covid-19 mediante la incorporación de las vacunas al esquema universal en el que se restringen las dosis de refuerzo a “personas con alto riesgo de enfermedad grave y muerte”: mujeres embarazadas, personas con enfermedades crónicas, adultos mayores y personal médico, estrategia que se prevé quedará definida en septiembre.
El documento que dio a conocer la Secretaría de Salud esta noche, después de que el secretario Jorge Alcocer Varela lo presentó antes los 32 secretarios de salud del país, considera recomendaciones que deben adoptar los espacios laborales, los públicos, educativos, gubernamentales y unidades médicas.
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Entre esas recomendaciones destacan la cancelación del semáforo sanitario hasta que pudiera presentarse una nueva emergencia, mantener ventilación de espacios, el uso de cubrebocas, aplicar pruebas diagnósticas para confirmar los casos, así como autorizar la Incapacidad Temporal para el Trabajo por cinco días.
El Plan de Gestión señala que el cubrebocas se puede generalizar “sólo cuando exista una emergencia sanitaria o un riesgo muy alto de que ésta se presente, reservándose su uso” a personas con síntomas respiratorios o con enfermedad confirmada, así como cuando el riesgo de contagio lo amerite o ayude a brindar tranquilidad a la población.
El Plan define en términos generales cuál será la estrategia de vacunación, los medicamentos que se usarán hacia el futuro ante posibles emergencias, cómo será la atención clínica en hospitales y ambulatoria, la conversión y reconversión hospitalaria, además de la disposición de medicinas, entre otros.
A pesar de que en el documento de 72 páginas se asegura que la estrategia de vacunación quedará definida para su aplicación a partir del mes de septiembre. Especifica que las vacunas se obtendrán a través de la compra consolidada y se darán autorizaciones de nuevos desarrollos de vacunas, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell dijo ante los funcionarios que en el país “no se requieren nuevos biológicos”.
Acuso que han sido “grupos de interés y medios corporativos los que han sembrado una narrativa de que son indispensables las vacunas bivalentes, sin embargo, no tienen sustento científico”, dijo el funcionario federal.
En la segunda reunión ordinaria del Consejo Nacional de Salud para el Bienestar (Conasabi), el secretario Alcocer recordó que el pasado 9 de mayo se publicó en el Diario Oficial de la Federación el decreto por el que se declara terminada la acción extraordinaria en materia de salubridad general.
El documento señala que hasta la semana 18 del 2023 se tiene un acumulado de 333 mil 961 defunciones
A pesar de que ninguno de los dos funcionarios hizo un balance de la pandemia, el documento señala que hasta la semana 18 del 2023 se tiene un acumulado de 333 mil 961 defunciones confirmadas en el país y la tendencia ha ido a la baja.
Refiere que 91 por ciento de las defunciones se dieron en los años 2020 y 2021, mientras que solo 8 por ciento corresponden al año 2022.
Informa que por semana epidemiológica, el promedio semanal de defunciones fue de 3 mil 292 en el año 2020, mostrando una reducción de 10.8 por ciento para el 2021, 84 por ciento para el 2022 y 95.5 por ciento en lo que va del 2023.
Indica que “por infección, inmunización o una combinación de ambas” más de 90 por ciento de los mexicanos tienen anticuerpos contra la enfermedad en todas las regiones del país.
Y las hospitalizaciones y muertes se han concentrado en los grupos de mayor edad en todas las curvas epidémicas, incluidas las últimas tres donde los grupos de población más afectados son los adultos de 60 y más años, con más de 60 por ciento del total de defunciones, y en menor medida, del grupo de 50 a 59 años con 20 por ciento adicional de las muertes.
El 70 por ciento de las defunciones confirmadas a Covid-19 no contaban un esquema de vacunación completo
El 70 por ciento de las defunciones confirmadas a Covid-19 no contaban un esquema de vacunación completo. Al mismo tiempo que se encontraron otros factores asociados a la mortalidad como ser mayor a 60 años, tener comorbilidades relevantes que aumentaron el riesgo tres veces o más, tales como enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), insuficiencia renal crónica (IRC), inmunosupresión, enfermedad cardiaca, infección por el Virus de la Inmunodeficiencia Humana y manifestaciones clínicas de SIDA (VIH/SIDA) y obesidad mórbida
Hasta ahora las personas no vacunadas conforman la mayoría de las defunciones observadas en las olas o picos más recientes, por lo que deberá ser de la mayor prioridad la recuperación de coberturas en esquemas primarios para todos los adultos, especialmente en aquellos municipios que históricamente han tenido un rezago social.
Ante la previsión de que el virus continuará evolucionando, y se espera que cause una enfermedad menos grave, con posible aumento de infecciones por temporadas el Plan establece que se “requerirán dosis periódicas de refuerzo de la vacuna para proteger a los grupos de alta prioridad, con mayor riesgo de enfermedad grave y muerte”.
“Se estima que pueden ocurrir picos periódicos en la transmisión (patrón estacional de picos de transmisión similar al de la influenza estacional) como resultado de una proporción creciente de individuos susceptibles a lo largo del tiempo, lo que puede requerir un refuerzo periódico para las poblaciones de alta prioridad.
De manera que prevé que la vacunación sea para personas en el grupo de alta prioridad que corren el mayor riesgo de enfermedad grave, hospitalización y muerte tanto con la serie primaria como con dosis de refuerzo tendrá el mayor impacto en la salud pública.
El Plan explica que a partir de la definición del Grupo de Expertos en Asesoramiento Estratégico sobre Inmunización (SAGE) de la OMS, nuestro país deberá utilizar cualquiera de las vacunas que cuente con la autorización ante la Cofepris.
El tipo de biológico a utilizar dependerá de la estrategia de vacunación a desarrollar: vacunación intramuros o campañas de vacunación extramuros, incluido el barrido casa a casa y la puesta de centros móviles de vacunación en plazas públicas o similares. Se considerará no solo la disponibilidad de las vacunas, sino las facilidades de conservación a temperaturas preferentemente de refrigeración, aunque en algunas áreas podrían utilizarse vacunas que requieran resguardo en condiciones de congelación.
La inmunización será anual para personas con alto riesgo de enfermedad grave y muerte. Además de mantener la notificación obligatoria de los Eventos Supuestamente Atribuibles a la Vacunación Inmunización (ESAVI) de la vacunación Covid, al sistema de vigilancia epidemiológica.
Hasta ahora no se considera la liberación de la vacuna para que pueda llegar al subsistema de salud particular
Pero define que la vacuna deberá ser adquirida mediante el mecanismo de compra consolidada de vacunas y que al igual que las demás vacunas, una vez que se apruebe su inclusión en el Compendio Nacional de Insumos para la Salud, podrán ser requeridas por cada una de las instituciones públicas de salud.
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Mientras ello se establece, el gobierno federal inicio la transición para que en septiembre de 2023, se pueda transitar a licencia sanitaria para las vacunas contra el virus SARS-CoV-2 que así lo soliciten, incluir la vacuna de Covid en el compendio Nacional de Insumos.
Su aplicación será a través de las Brigadas Especiales a través de la Subsecretaría de Prevención y Promoción de la Salud o su designado, mientras la adquisición de los biológicos se continuará realizando a nivel federal, la operación se continuará realizando mediante los Coordinadores Estatales de las Brigadas Especiales Correcaminos.
