Las pruebas realizadas el lunes a los pasajeros a bordo del crucero Diamond Princess aislado en Japón confirmaron al menos 65 nuevos casos de coronavirus, según informó el capitán del barco, mientras que algunas personas recurrieron a las redes sociales para informar sobre las duras condiciones de su confinamiento.
La cifra, anunciada a los pasajeros después de que el operador del crucero informara en un comunicado de la detección de 66 nuevos casos, elevando el recuento a bordo a 135, es reflejo de la rápida propagación del brote en el barco atracado en el puerto japonés de Yokohama.
Entre los nuevos casos se encuentran 45 japoneses y 11 estadounidenses, dijo la empresa operadora del barco, Princess Cruises, en un comunicado.
"Esta no es una noticia que ninguno de nosotros quisiera recibir", dijo el capitán a los pasajeros en una transmisión difundida por los altavoces instalados en sus camarotes.
"Sin embargo, también se nos ha indicado que, puesto que estamos dentro del período de cuarentena de 14 días, no se trata de una noticia inesperada".
Los comentarios del capitán sobre los 66 nuevos casos pudieron ser oídos en una grabación de audio publicada en Twitter por Yardley Wong, un pasajero que documentó la experiencia en el barco usando el hashtag #anxiety.
Sin embargo, en un anuncio posterior, el capitán informó a los pasajeros que se le había avisado para que corrigiese la cifra de nuevas infecciones a 65, según las grabaciones de audio publicadas por los pasajeros.
El Ministerio de Salud de Japón confirmó los 65 casos en un comunicado. Reuters no logró ponerse en contacto con el operador del crucero para solicitarle comentarios sobre el cambio.
El Diamond Princess fue puesto en cuarentena por un periodo de dos semanas tras llegar el 3 de febrero a Yokohama, al sur de Tokio, después de que un hombre que desembarcó en Hong Kong fuera diagnosticado con el coronavirus.
Alrededor de 3 mil 700 personas permanecen a bordo de la nave, con una tripulación de unas mil 100 personas y una capacidad de pasaje para 2.670 personas. A los pasajeros se les ha permitido acceder por turnos a las cubiertas para tomar aire fresco y se les insta a tomarse la temperatura regularmente.
