Por Abel Miranda Ayala
Con el féretro colocado al centro de la explanada de la normaly la banda de guerra ejecutando el toque de silencio, este díadieron el último adiós a los estudiantes de Ayotzinapa quefueron ejecutados en un supuesto asalto al transporte público enla carretera Chilpancingo-Tixtla. Esta fue sucasa los últimos tres años, por eso fue necesario venir adespedirlos, antes de llevarlos a sus comunidades de origen”,señalaron compañeros. El martes por la tarde, losnormalistas regresaban a Tixtla tras haber realizado sus labores depráctica profesional en escuelas del centro de Chilpancingo, setrasladaban en una unidad de servicio público que fue detenida porhombres armados que presumiblemente asaltarían a los usuarios, sinembargo, asesinaron a los pasajeros.
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“Ayotzy Vive, Jonathan Vive, la lucha sigue”, gritaron losestudiantes mientras el féretro lentamente cruzó la explanada dela normal sostenida por seis de los jóvenes que fueron compañerosde aula de los hoy homenajeados.
En el asalto fueron asesinadas seis personas, de estas dosfueron estudiantes de la escuela de Aytozinapa, Jonathan MoralesFernández y Filemón Tacuba, ambos originarios de la región deCosta Chica, el primero de la comunidad de Saucitos, municipio deTecoanapa y el segundo de de Apantla, perteneciente al municipio deAyutla.
Ambos normalistas se encontraban en su último año deformación escolar, y por eso su actividad se realiza comopracticantes frente a grupo y tenían que trasladarse diariamente aChilpancingo, para regresar a la normal una vez concluida lajornada laboral.
DIRIGENCIA ESTUDIANTIL CONDENAHECHOS
El secretario general del comité estudiantil Ernesto Guerrero,a nombre de todos sus compañeros, condenó los hechos y lanzó algobierno la exigencia para que se investigue a fondo los hechos yque se castigue a los responsables, sin embargo dijeron no estarcompletamente de acuerdo con la teoría del asalto.
“Lo que nosotros vemos es una campaña de terror y miedo queviene con la tendencia de pretender desaparecer esta institución yno se trata de un hecho aislado, es un caso que está ligado con lamuerte de dos compañeros el 11 de diciembre en Chilpancingo, otrosatropellados en Atoyac, y por supuesto la desaparición de nuestroscompañeros de Iguala”.
Insistió en que el crimen no puede verse como un simple hechode la delincuencia, porque además el propio gobierno ha señaladoque este grupo delictivo habría cometido otros actos delictivos,lo que hace más grave el caso “porqué cuando sale un grupo demanifestantes de inmediato se activan miles de policías y ahoraque un grupo delincuencial asalta negocios, y asesina a jóvenesnadie sale a detenerlos”.
Finalmente el dirigente estudiantil no descartó que en lospróximos días pueda haber manifestaciones para exigir justicia,pero no este miércoles, pues se tiene que primero atender todo elprotocolo del sepelio, los homenajes y el apoyo a las familias,pero es indudable que el 4 de Octubre se sumará a las fechastrágicas del efemérides de Ayotzinapa”.
