/ miércoles 20 de diciembre de 2017

Aguas profundas | Adiós a la seguridad energética

La alerta que emitió la Asociación Mexicana de Empresas de Hidrocarburos (AMEXHI), a través de su órgano de difusión, promoción, propaganda, cabildeo –todo junto o separado- Pulso Energético sobre el cambio fiscal en la industria petrolera de Estados Unidos debe ser tomada en cuenta en las siguientes rondas petroleras, tanto por la Comisión Nacional de Hidrocarburos como por la Secretaría de Hacienda; ambas dependencias deben de entender que no tienes la sartén por el mango.

Peor, ya no tienen ni el sartén.

El lobby petrolero mexicano, cada vez goza de mejor salud por cierto, advierte, en una compilación de los análisis disponibles, que la reforma fiscal de Trump cobrará menos impuestos corporativos que pasarían del 35% actual a un 20-22% eso pone a los proyectos energéticos en Estados Unidos en una posición envidiable, ahí sí, de profetas en su propia tierra porque serían sus yacimientos mucho más competitivos que los de Canadá, Colombia, México o incluso Brasil, eso hablando de exploración y producción de aceite.

Los petroleros advierten que un proyecto de producción de Estados Unidos, a los precios actuales con yacimientos similares, es más rentable y en el caso de México, que recién estrena su apertura y está urgido de resultados para el corto plazo, lo importante es que se ponga las pilas e implemente a la voz de ya cambios fiscales.

Los petroleros de AMEXHI dicen que se debe de desarrollar un régimen fiscal y contractual especial para yacimientos no convencionales –como el shale gas o incluso aguas profundas-, buscar una integración regional, acelerar las rondas petroleras –las de asociación y los nuevos territorios, se entiende en el texto- para mejorar el perfil. En suma, ponerse a competir a ver qué se puede recoger de la inversión petrolera.

¿Qué significa esta recomendación? Abiertamente muestran el camino que, desde su perspectiva, hay que seguir si se quiere seguir en este negocio. Es evidente que una presión como está hace unos cinco años era inimaginable, pero las condiciones han cambiado. Ahora son los privados los que sugieren o invitan o alertan en cómo hacer las cosas en actos que antes se presumían de absoluta soberanía. Van las autoridades a promover el cambio que piden las 49 empresas petroleras que están en el país, muchas de ellas trasnacionales. ¿Cambiar lo que piden los petroleros es debilidad? Depende, en este momento lo que se necesita es dinero y ellos lo tienen. Los precios no se ve que vayan a subir demasiado y las finanzas públicas mexicanas están petrolizadas.

Ceder es sobrevivir, la advertencia hecha por los analistas de Pulso Energético refleja fielmente el pensamiento de los petroleros. Hay mejores oportunidades en otra parte o cambian o, bueno, irse no es demasiado difícil.

Buzos

1.-Pues la gente de Pemex Logística, de Ignacio Aguilar, finalmente dobló a los de la Comisión Reguladora de Energía, que preside Guillermo García Alcocer, y mandí a Stand By la temporada abierta en almacenamiento luego del desastre ocurrido en la franja de Baja California y Sonora.

No los pierda de vista, hasta donde se sabe los planes para vender al menos el 40% de las terminales de Pemex sigue en el escritorio del nuevo director.

2.-Por cierto, el ambiente en el Consejo de Administración de Pemex no es tan festivo como parece. Las relaciones del nuevo director Carlos Treviño con el PAN han hecho que varios levanten las cejas, sobre todo en temas como el combate al mercado negro de combustibles en Puebla.

La alerta que emitió la Asociación Mexicana de Empresas de Hidrocarburos (AMEXHI), a través de su órgano de difusión, promoción, propaganda, cabildeo –todo junto o separado- Pulso Energético sobre el cambio fiscal en la industria petrolera de Estados Unidos debe ser tomada en cuenta en las siguientes rondas petroleras, tanto por la Comisión Nacional de Hidrocarburos como por la Secretaría de Hacienda; ambas dependencias deben de entender que no tienes la sartén por el mango.

Peor, ya no tienen ni el sartén.

El lobby petrolero mexicano, cada vez goza de mejor salud por cierto, advierte, en una compilación de los análisis disponibles, que la reforma fiscal de Trump cobrará menos impuestos corporativos que pasarían del 35% actual a un 20-22% eso pone a los proyectos energéticos en Estados Unidos en una posición envidiable, ahí sí, de profetas en su propia tierra porque serían sus yacimientos mucho más competitivos que los de Canadá, Colombia, México o incluso Brasil, eso hablando de exploración y producción de aceite.

Los petroleros advierten que un proyecto de producción de Estados Unidos, a los precios actuales con yacimientos similares, es más rentable y en el caso de México, que recién estrena su apertura y está urgido de resultados para el corto plazo, lo importante es que se ponga las pilas e implemente a la voz de ya cambios fiscales.

Los petroleros de AMEXHI dicen que se debe de desarrollar un régimen fiscal y contractual especial para yacimientos no convencionales –como el shale gas o incluso aguas profundas-, buscar una integración regional, acelerar las rondas petroleras –las de asociación y los nuevos territorios, se entiende en el texto- para mejorar el perfil. En suma, ponerse a competir a ver qué se puede recoger de la inversión petrolera.

¿Qué significa esta recomendación? Abiertamente muestran el camino que, desde su perspectiva, hay que seguir si se quiere seguir en este negocio. Es evidente que una presión como está hace unos cinco años era inimaginable, pero las condiciones han cambiado. Ahora son los privados los que sugieren o invitan o alertan en cómo hacer las cosas en actos que antes se presumían de absoluta soberanía. Van las autoridades a promover el cambio que piden las 49 empresas petroleras que están en el país, muchas de ellas trasnacionales. ¿Cambiar lo que piden los petroleros es debilidad? Depende, en este momento lo que se necesita es dinero y ellos lo tienen. Los precios no se ve que vayan a subir demasiado y las finanzas públicas mexicanas están petrolizadas.

Ceder es sobrevivir, la advertencia hecha por los analistas de Pulso Energético refleja fielmente el pensamiento de los petroleros. Hay mejores oportunidades en otra parte o cambian o, bueno, irse no es demasiado difícil.

Buzos

1.-Pues la gente de Pemex Logística, de Ignacio Aguilar, finalmente dobló a los de la Comisión Reguladora de Energía, que preside Guillermo García Alcocer, y mandí a Stand By la temporada abierta en almacenamiento luego del desastre ocurrido en la franja de Baja California y Sonora.

No los pierda de vista, hasta donde se sabe los planes para vender al menos el 40% de las terminales de Pemex sigue en el escritorio del nuevo director.

2.-Por cierto, el ambiente en el Consejo de Administración de Pemex no es tan festivo como parece. Las relaciones del nuevo director Carlos Treviño con el PAN han hecho que varios levanten las cejas, sobre todo en temas como el combate al mercado negro de combustibles en Puebla.