/ sábado 8 de junio de 2024

Atención social en el IMSS durante el envejecimiento

Por Luis Miguel Hernández Flores


México enfrenta un rápido envejecimiento poblacional. De acuerdo con cifras del INEGI en 2020 había en el país más de 15 millones de personas de 60 años o más, lo que constituía el 12.01 por ciento de la población total. Se estima que para 2050 una de cada cuatro personas en México formará parte de este sector.

Esta etapa de la existencia se vive de manera diversa. Las experiencias, riesgos, eventos positivos y negativos en el curso de los años influyen en los distintos niveles de capacidad funcional. Algunas personas mantienen completa independencia, mientras que otras viven con enfermedades o limitaciones y una minoría requiere cuidados debido a sus condiciones.

Por ello, la Organización Mundial de la Salud declaró la década del envejecimiento saludable para 2020-2030, promoviendo una vida más larga y sana. Esto incluye cambiar las percepciones sobre el envejecimiento, fomentar la independencia y autonomía, ofrecer atención integral centrada en la persona, así como proveer cuidados a largo plazo para quienes los necesiten.

En este contexto, el IMSS ha implementado acciones integrales de atención social para las personas mayores, particularmente a través de programas e intervenciones según la funcionalidad de cada individuo.

Entre ellas, destaca el Programa de Envejecimiento Activo (PREA), el cual se desarrolla en los 122 Centros de Seguridad Social con actividades de estimulación física, social y emocional, cuyo objetivo es mantener y mejorar la operatividad de los mayores. Esta iniciativa ha demostrado ser efectiva en fortalecer las redes de apoyo y combatir el aislamiento.

Asimismo, los Clubes de Personas Mayores que operan en Durango, Michoacán, Ciudad de México Norte y Sur, así como Estado de México Poniente, son espacios de encuentro que promueven la autonomía e integración.

Por otro lado, el programa de Turismo para Personas Mayores incluye intervenciones que contribuyen a lograr la mayor capacidad funcional a través de viajes seguros con actividades en los Centros Vacacionales del Instituto.

Para aquellos con limitaciones funcionales o que requieren cuidados, el IMSS ofrece opciones como capacitación a distancia mediante cursos en la plataforma CLIMSS y de manera presencial a través del Diplomado de Cuidadores Gerontológicos en el Centro de Atención Social a la Salud de las y los Adultos Mayores (CASSAAM), donde además se forman acompañantes y promotores para personas mayores.

También se ha establecido el primer Centro de Día del Instituto, donde se ofrecen cuidados bajo un modelo centrado en la persona, beneficiando tanto a las personas mayores como a sus familias.

El camino hacia un envejecimiento saludable es largo y requiere la colaboración de múltiples sectores; el IMSS avanza con diversas acciones para prepararse ante un México envejeciente.


Titular de la División de Promoción de la Salud, Dirección de Prestaciones Médicas y Sociales del IMSS


Por Luis Miguel Hernández Flores


México enfrenta un rápido envejecimiento poblacional. De acuerdo con cifras del INEGI en 2020 había en el país más de 15 millones de personas de 60 años o más, lo que constituía el 12.01 por ciento de la población total. Se estima que para 2050 una de cada cuatro personas en México formará parte de este sector.

Esta etapa de la existencia se vive de manera diversa. Las experiencias, riesgos, eventos positivos y negativos en el curso de los años influyen en los distintos niveles de capacidad funcional. Algunas personas mantienen completa independencia, mientras que otras viven con enfermedades o limitaciones y una minoría requiere cuidados debido a sus condiciones.

Por ello, la Organización Mundial de la Salud declaró la década del envejecimiento saludable para 2020-2030, promoviendo una vida más larga y sana. Esto incluye cambiar las percepciones sobre el envejecimiento, fomentar la independencia y autonomía, ofrecer atención integral centrada en la persona, así como proveer cuidados a largo plazo para quienes los necesiten.

En este contexto, el IMSS ha implementado acciones integrales de atención social para las personas mayores, particularmente a través de programas e intervenciones según la funcionalidad de cada individuo.

Entre ellas, destaca el Programa de Envejecimiento Activo (PREA), el cual se desarrolla en los 122 Centros de Seguridad Social con actividades de estimulación física, social y emocional, cuyo objetivo es mantener y mejorar la operatividad de los mayores. Esta iniciativa ha demostrado ser efectiva en fortalecer las redes de apoyo y combatir el aislamiento.

Asimismo, los Clubes de Personas Mayores que operan en Durango, Michoacán, Ciudad de México Norte y Sur, así como Estado de México Poniente, son espacios de encuentro que promueven la autonomía e integración.

Por otro lado, el programa de Turismo para Personas Mayores incluye intervenciones que contribuyen a lograr la mayor capacidad funcional a través de viajes seguros con actividades en los Centros Vacacionales del Instituto.

Para aquellos con limitaciones funcionales o que requieren cuidados, el IMSS ofrece opciones como capacitación a distancia mediante cursos en la plataforma CLIMSS y de manera presencial a través del Diplomado de Cuidadores Gerontológicos en el Centro de Atención Social a la Salud de las y los Adultos Mayores (CASSAAM), donde además se forman acompañantes y promotores para personas mayores.

También se ha establecido el primer Centro de Día del Instituto, donde se ofrecen cuidados bajo un modelo centrado en la persona, beneficiando tanto a las personas mayores como a sus familias.

El camino hacia un envejecimiento saludable es largo y requiere la colaboración de múltiples sectores; el IMSS avanza con diversas acciones para prepararse ante un México envejeciente.


Titular de la División de Promoción de la Salud, Dirección de Prestaciones Médicas y Sociales del IMSS