Como he mencionado en participaciones anteriores, la constante de esta Legislatura en el Congreso de la Unión ha sido la de establecer mecanismos que permitan acercar el quehacer legislativo a la ciudadanía a través de ejercicios de parlamento abierto, a fin de reducir la brecha entre gobernantes y gobernados. Corresponde ahora el turno a la Reforma del Estado y Electoral que nos hemos propuestos analizar en la Cámara de Diputados.
Los días 11, 12 y 13 de junio, llevaremos a cabo los primeros foros sobre la Reforma del Estado, donde tendremos como ejes los temas de: competencia de los órganos del Estado, la Federación mexicana y el sistema de fiscalización y austeridad de los gastos como principio constitucional.
La semana siguiente, los días 18, 19 y 20 de junio celebraremos el foro para la Reforma Electoral, bajo los siguientes temas: reformas a los órganos electorales, régimen de los partidos políticos y contexto de la nueva Reforma Electoral.
El objetivo de estos ejercicios será el de permitir que las autoridades electorales, partidos políticos, especialistas y académicos expongan sus puntos de vista y opiniones sobre el particular, en especial, respecto de la iniciativa que ha generado mayor atención pública, referente a la optimización de las estructuras electorales a efecto de que sea sólo el INE quien organice las elecciones federales y locales, prescindiendo de la estructura de los OPLES.
En efecto, la propuesta que he venido realizando se centra en un diagnóstico sobre las funciones de los OPLES que fueron drásticamente reducidas a partir de la reforma del 2014, sin que esto tuviera correlación con sus presupuestos que no solo se mantuvieron, sino que aumentaron. También hemos sostenido que la función de los OPLES perdió todo rastro de federalismo y que se encuentra sujeta a la conducción del INE, quien designa y remueve a sus integrantes, y realiza muchas otras más funciones que antes eran competencia estatal, y en algunos casos, incluso los sustituye totalmente, como está sucediendo en la actualidad con la elección extraordinaria en Puebla.
A partir de esto, con la supresión de la estructura de los OPLES, los estados tendrían ahorros que irían de entre 7 mil a 9 mil millones de pesos, que les permitirían direccionar ese gasto a otros rubros mucho más necesarios como: salud, educación, inversión en infraestructura, generación de empleos, etcétera.
Vale la pena entrar a fondo en ese debate, sin dogmas, pero también sin visiones parciales de autodefensa por parte de los OPLES, en donde, siendo honestos, hemos escuchado de todo, menos autocrítica sobre el gasto excesivo que han venido realizando.
Diputado federal por Morena
@Sergeluna_S
