/ lunes 18 de septiembre de 2017

El mundo de la realeza | ¿Por qué deben permanecer las monarquías hoy en día?

Los países monárquicos tienen este sistema de gobierno desde hace siglos. De las más antiguas monarquías están la danesa y la inglesa. Cabe destacar a estas dos familias reales porque han sido noticias en estos últimos días: por el embarazo de la duquesa de Cambridge y porque la corte real danesa publicó, oficialmente, que el príncipe consorte Enrique, esposo de Margarita II, padece de demencia según sus chequeos médicos.

Las monarquías tienen una atracción especial para los turistas y admiradores de cada casa real en todo el mundo, porque en todo el mundo existen monarquías.

Periódicos, revistas, las redes sociales, televisión, cine, libros, todos hacemos nuestro espacio para criticarlos, comentar sus actos sociales y de caridad, sus vacaciones, funerales que son considerados privados o de Estado, y de hecho, Margarita II, la reina danesa, ejerce además, de diseñadora y Sonia de Noruega, de artista así como el príncipe de Gales, quienes pintan y escriben libros.

Las distintas personalidades de los royals también se dan a querer o a odiar. Las casas reales ya aceptan a plebeyos y estos tienen la oportunidad de apoyar a sus cónyuges en sus obligaciones hacia sus respectivos pueblos.

Diana de Gales Q.E.P.D fue la pionera al acercarse más a las personas y besarlas, abrazarlas y ese carisma se ha vuelto inolvidable. Ella vive en nuestros corazones. Así que los actuales royals tratan de hacer un trabajo similar con su propio estilo y encanto.

A mí me parece que Daniel de Suecia, por ejemplo, aunque es muy serio y discreto, es un buen ejemplo en la actualidad de cómo debe de ser un futuro príncipe consorte, esposo de la heredera del trono de Suecia y ojalá pudiera llegar a ser rey consorte en su momento, aunque eso es imposible ya que, al ser yerno del rey, no hijo, solo será príncipe consorte.

Enrique de Dinamarca siempre quiso ser rey, pero, era yerno de rey y por lo visto ambicioso. Ahora que está enfermo y a los 80 años, no se sabe si quiso la corte callar sus opiniones rebeldes con el anuncio de su enfermedad o es por eso que anunciaron que realmente está enfermo de demencia senil.

Pero, la realeza siempre dará de que hablar y nosotros para eso informaremos a ustedes sobre sus actividades sociales y culturales que, aunque parezca contradictorio, sus mismas aficiones personales se vuelven públicas en exposiciones o cuando publican un libro.

Apoyar a las casas reales y criticarlas es un placer. Es un gusto. Es una afición y es un estudio de la historia tanto de tiempos remotos como de la actualidad. ¿No les parece?

Los países monárquicos tienen este sistema de gobierno desde hace siglos. De las más antiguas monarquías están la danesa y la inglesa. Cabe destacar a estas dos familias reales porque han sido noticias en estos últimos días: por el embarazo de la duquesa de Cambridge y porque la corte real danesa publicó, oficialmente, que el príncipe consorte Enrique, esposo de Margarita II, padece de demencia según sus chequeos médicos.

Las monarquías tienen una atracción especial para los turistas y admiradores de cada casa real en todo el mundo, porque en todo el mundo existen monarquías.

Periódicos, revistas, las redes sociales, televisión, cine, libros, todos hacemos nuestro espacio para criticarlos, comentar sus actos sociales y de caridad, sus vacaciones, funerales que son considerados privados o de Estado, y de hecho, Margarita II, la reina danesa, ejerce además, de diseñadora y Sonia de Noruega, de artista así como el príncipe de Gales, quienes pintan y escriben libros.

Las distintas personalidades de los royals también se dan a querer o a odiar. Las casas reales ya aceptan a plebeyos y estos tienen la oportunidad de apoyar a sus cónyuges en sus obligaciones hacia sus respectivos pueblos.

Diana de Gales Q.E.P.D fue la pionera al acercarse más a las personas y besarlas, abrazarlas y ese carisma se ha vuelto inolvidable. Ella vive en nuestros corazones. Así que los actuales royals tratan de hacer un trabajo similar con su propio estilo y encanto.

A mí me parece que Daniel de Suecia, por ejemplo, aunque es muy serio y discreto, es un buen ejemplo en la actualidad de cómo debe de ser un futuro príncipe consorte, esposo de la heredera del trono de Suecia y ojalá pudiera llegar a ser rey consorte en su momento, aunque eso es imposible ya que, al ser yerno del rey, no hijo, solo será príncipe consorte.

Enrique de Dinamarca siempre quiso ser rey, pero, era yerno de rey y por lo visto ambicioso. Ahora que está enfermo y a los 80 años, no se sabe si quiso la corte callar sus opiniones rebeldes con el anuncio de su enfermedad o es por eso que anunciaron que realmente está enfermo de demencia senil.

Pero, la realeza siempre dará de que hablar y nosotros para eso informaremos a ustedes sobre sus actividades sociales y culturales que, aunque parezca contradictorio, sus mismas aficiones personales se vuelven públicas en exposiciones o cuando publican un libro.

Apoyar a las casas reales y criticarlas es un placer. Es un gusto. Es una afición y es un estudio de la historia tanto de tiempos remotos como de la actualidad. ¿No les parece?