/ sábado 6 de abril de 2024

Tech trends / El acceso a la salud

@daguilargallego

Con la implementación de la inteligencia artificial (IA) en la medicina, estamos presenciando una revolución que tiene el potencial de transformar el diagnóstico y tratamiento de enfermedades en todo el mundo, incluyendo México. La herramienta Mia, probada recientemente en el Reino Unido, demuestra esta evolución al haber analizado cerca de 10,000 mamografías y detectado cánceres que no pudieron ser identificados por médicos ni por estudios sofisticados. Este avance no solo resalta la capacidad de la IA para identificar patologías en etapas muy tempranas, sino también su potencial para reducir significativamente los tiempos de espera para los resultados de diagnósticos.

Mia logró identificar en 11 pacientes tumores en etapa muy temprana, una de las pacientes que contó su historia pudo ser tratado de un tumor, de solo 6 mm, por lo que solo necesitó una operación simple y tratamiento de radiación por menos de una semana para estar “limpio”. Los expertos aseguran que si los tumores son encontrados con un tamaño menor a 15mm pueden ser tratados con un porcentaje de éxito que supera el 90 por ciento.

A nivel global, la adopción de estas tecnologías avanza rápidamente gracias a su capacidad para mejorar la precisión y eficiencia de los servicios médicos. En México, un país con desafíos enormes en acceso y calidad de atención médica, la IA ofrece una oportunidad única para superar barreras, optimizando recursos y mejorando la cobertura de salud.

La expectativa para el futuro de la IA en la medicina es que continúe complementando y potenciando el trabajo de los profesionales de la salud, mejorando la toma de decisiones médicas y personalizando el tratamiento para los pacientes. En México, esto podría significar una mejora sustancial en la detección temprana de enfermedades como el cáncer, así como en la gestión y asignación de recursos en el sistema de salud.

Sin embargo, para que México y otros países se beneficien plenamente, se necesitan inversiones en infraestructura tecnológica, formación de talento en nuevas tecnologías y marcos regulatorios que aseguren el uso ético y seguro de la IA en salud. La colaboración entre el sector público, privado y la academia será clave para desarrollar soluciones innovadoras que respondan a las necesidades específicas del país.

La historia de Mia y su impacto en el diagnóstico del cáncer es solo un ejemplo del potencial transformador de la IA. Mirando hacia adelante, podemos esperar que estas tecnologías no solo mejoren la eficacia de los tratamientos y diagnósticos disponibles sino que también hagan la atención médica más accesible para todos, marcando el comienzo de una nueva era en la medicina, cerrando la brecha de acceso a la salud donde hoy es un accesorio de lujo para los que tienen recursos o suerte.

@daguilargallego

Con la implementación de la inteligencia artificial (IA) en la medicina, estamos presenciando una revolución que tiene el potencial de transformar el diagnóstico y tratamiento de enfermedades en todo el mundo, incluyendo México. La herramienta Mia, probada recientemente en el Reino Unido, demuestra esta evolución al haber analizado cerca de 10,000 mamografías y detectado cánceres que no pudieron ser identificados por médicos ni por estudios sofisticados. Este avance no solo resalta la capacidad de la IA para identificar patologías en etapas muy tempranas, sino también su potencial para reducir significativamente los tiempos de espera para los resultados de diagnósticos.

Mia logró identificar en 11 pacientes tumores en etapa muy temprana, una de las pacientes que contó su historia pudo ser tratado de un tumor, de solo 6 mm, por lo que solo necesitó una operación simple y tratamiento de radiación por menos de una semana para estar “limpio”. Los expertos aseguran que si los tumores son encontrados con un tamaño menor a 15mm pueden ser tratados con un porcentaje de éxito que supera el 90 por ciento.

A nivel global, la adopción de estas tecnologías avanza rápidamente gracias a su capacidad para mejorar la precisión y eficiencia de los servicios médicos. En México, un país con desafíos enormes en acceso y calidad de atención médica, la IA ofrece una oportunidad única para superar barreras, optimizando recursos y mejorando la cobertura de salud.

La expectativa para el futuro de la IA en la medicina es que continúe complementando y potenciando el trabajo de los profesionales de la salud, mejorando la toma de decisiones médicas y personalizando el tratamiento para los pacientes. En México, esto podría significar una mejora sustancial en la detección temprana de enfermedades como el cáncer, así como en la gestión y asignación de recursos en el sistema de salud.

Sin embargo, para que México y otros países se beneficien plenamente, se necesitan inversiones en infraestructura tecnológica, formación de talento en nuevas tecnologías y marcos regulatorios que aseguren el uso ético y seguro de la IA en salud. La colaboración entre el sector público, privado y la academia será clave para desarrollar soluciones innovadoras que respondan a las necesidades específicas del país.

La historia de Mia y su impacto en el diagnóstico del cáncer es solo un ejemplo del potencial transformador de la IA. Mirando hacia adelante, podemos esperar que estas tecnologías no solo mejoren la eficacia de los tratamientos y diagnósticos disponibles sino que también hagan la atención médica más accesible para todos, marcando el comienzo de una nueva era en la medicina, cerrando la brecha de acceso a la salud donde hoy es un accesorio de lujo para los que tienen recursos o suerte.