/ miércoles 9 de septiembre de 2020

¿Triunfó el pueblo?

Inconcebible el que un gobernante actúe por odio y por venganza, como lo hace López Obrador. Su video, a raíz de la negativa del INE, a darle el registro a la organización de Margarita Zavala, es un agravio contra todos los mexicanos. O, ¿considera que la investidura le da el derecho de seleccionar como “súbditos”, sólo a aquellos que lo aplauden como focas?

Su respuesta autoritaria, lo pinta como un populista ajeno a los principios básicos de la democracia y como un político, incapaz de manejar sus propias emociones. Con ese talante, sálvese el que pueda, porque, su “cacería de brujas” particular, seguirá siendo el signo de un sexenio en el que se tapan los grandes problemas nacionales, con dosis fuertes de veneno, que dividen a la población.

Dijo que era un “triunfo del pueblo”. Sus alucinaciones lo llevan a imaginarse a millones de aztecas preocupados por la posibilidad de que surgiera un nuevo partido. ¿Sabría siquiera “el pueblo”, que el INE se reuniría para tomar esa decisión? Y, ¿cuántos sectores de la ciudadanía estarían “tronándose los dedos” por conocer el resultado?

Si los consejeros electorales actuaron o no, con absoluto apego a la Ley, es una materia que tendrían que juzgar los involucrados en el sainete. Él, nada tendría que opinar sobre un asunto que no es de su responsabilidad y sí debería hacerlo en cuanto a los problemas que nos asolan. Pero de eso, ni “Pío”.

Los Partidos Políticos están en franca decadencia. Del PRI no queda sombra y da la impresión de que, como los tienen agarrados del cuello por sus corruptelas, actuarán en plan de comparsa de Morena, antes de que les destapen peores cloacas.

Acción Nacional, de llorar. En manos de un grupúsculo mediocre, con un padrón cada vez más raquítico y sin los líderes del pasado, que todavía tenían principios e ideología. Su declive se inició con el éxodo encabezado por Don José González Torres y los que entonces eran militantes comprometidos, como Jesús González Schmall, Bernardo Bátiz y Jorge Eugenio Ortíz Gallegos, entre tantos otros. Decidieron dejar la militancia, en lugar de pelear por la recuperación del organismo, que se creó a golpe de calcetín, con un esfuerzo sobrehumano por parte de sus fundadores. Los “rebeldes” intentaron formar una fuerza política, pero fracasaron y perdieron la posibilidad de conformar un frente democrático.

El PRD se extravió en sus tribus y está a punto de la extinción. El nombramiento de Jesús Zambrano (Del Grupo de los “Chuchos”), como Presidente, intenta darle aire fresco, aunque se ve difícil. Con una contra golpeada por el triunfo de AMLO y con el Poder del Estado en manos del tabasqueño, parecería que Morena tiene el camino abierto para el 2021.

Las mayorías dejaron de creer en quienes se transformaron en aparatos burocráticos hacedores de ricos. El rechazo es generalizado y, aunque la creación de AMLO (Morena) aparece en el primer lugar de las encuestas, el porcentaje de aprobación es mínimo.

Un fuerte sector de decepcionados panistas, esperaban el arribo de México Libre. Zavala y Calderón sostienen que, a última hora, los Consejeros Electorales cambiaron las reglas, por lo que peleará su caso ante el Tribunal Federal Electoral. Será la última palabra.

Estamos urgidos de fuerzas de oposición. Todo gobierno necesita una contraparte que le dé equilibrio y evite el autoritarismo –como lo estamos viviendo- del Poder absoluto, en manos de un hombre.



catalinanq@hotmail.com

@catalinanq

Inconcebible el que un gobernante actúe por odio y por venganza, como lo hace López Obrador. Su video, a raíz de la negativa del INE, a darle el registro a la organización de Margarita Zavala, es un agravio contra todos los mexicanos. O, ¿considera que la investidura le da el derecho de seleccionar como “súbditos”, sólo a aquellos que lo aplauden como focas?

Su respuesta autoritaria, lo pinta como un populista ajeno a los principios básicos de la democracia y como un político, incapaz de manejar sus propias emociones. Con ese talante, sálvese el que pueda, porque, su “cacería de brujas” particular, seguirá siendo el signo de un sexenio en el que se tapan los grandes problemas nacionales, con dosis fuertes de veneno, que dividen a la población.

Dijo que era un “triunfo del pueblo”. Sus alucinaciones lo llevan a imaginarse a millones de aztecas preocupados por la posibilidad de que surgiera un nuevo partido. ¿Sabría siquiera “el pueblo”, que el INE se reuniría para tomar esa decisión? Y, ¿cuántos sectores de la ciudadanía estarían “tronándose los dedos” por conocer el resultado?

Si los consejeros electorales actuaron o no, con absoluto apego a la Ley, es una materia que tendrían que juzgar los involucrados en el sainete. Él, nada tendría que opinar sobre un asunto que no es de su responsabilidad y sí debería hacerlo en cuanto a los problemas que nos asolan. Pero de eso, ni “Pío”.

Los Partidos Políticos están en franca decadencia. Del PRI no queda sombra y da la impresión de que, como los tienen agarrados del cuello por sus corruptelas, actuarán en plan de comparsa de Morena, antes de que les destapen peores cloacas.

Acción Nacional, de llorar. En manos de un grupúsculo mediocre, con un padrón cada vez más raquítico y sin los líderes del pasado, que todavía tenían principios e ideología. Su declive se inició con el éxodo encabezado por Don José González Torres y los que entonces eran militantes comprometidos, como Jesús González Schmall, Bernardo Bátiz y Jorge Eugenio Ortíz Gallegos, entre tantos otros. Decidieron dejar la militancia, en lugar de pelear por la recuperación del organismo, que se creó a golpe de calcetín, con un esfuerzo sobrehumano por parte de sus fundadores. Los “rebeldes” intentaron formar una fuerza política, pero fracasaron y perdieron la posibilidad de conformar un frente democrático.

El PRD se extravió en sus tribus y está a punto de la extinción. El nombramiento de Jesús Zambrano (Del Grupo de los “Chuchos”), como Presidente, intenta darle aire fresco, aunque se ve difícil. Con una contra golpeada por el triunfo de AMLO y con el Poder del Estado en manos del tabasqueño, parecería que Morena tiene el camino abierto para el 2021.

Las mayorías dejaron de creer en quienes se transformaron en aparatos burocráticos hacedores de ricos. El rechazo es generalizado y, aunque la creación de AMLO (Morena) aparece en el primer lugar de las encuestas, el porcentaje de aprobación es mínimo.

Un fuerte sector de decepcionados panistas, esperaban el arribo de México Libre. Zavala y Calderón sostienen que, a última hora, los Consejeros Electorales cambiaron las reglas, por lo que peleará su caso ante el Tribunal Federal Electoral. Será la última palabra.

Estamos urgidos de fuerzas de oposición. Todo gobierno necesita una contraparte que le dé equilibrio y evite el autoritarismo –como lo estamos viviendo- del Poder absoluto, en manos de un hombre.



catalinanq@hotmail.com

@catalinanq