/ sábado 14 de mayo de 2022

Una vez más, controversia hacia la Cumbre de las Américas

Una parte importante de los procesos de globalización impulsados por la humanidad, a lo largo de las décadas recientes, ha sido la organización de reuniones cumbre, que han ubicado en un solo lugar a los mandatarios de diferentes países, de acuerdo a los intereses que tienen en común.

Dentro de este marco, una de las cumbres más célebres es la que aglutina a los gobernantes de las naciones más industrializadas del mundo, en este caso me refiero al llamado ‘Grupo de los Siete’ (G7), integrado por Estados Unidos, Canadá, Japón, Reino Unido, Italia, Francia y Canadá. Lo referente a las naciones pertenecientes a esta agrupación, ha sido motivo de controversia, por los países que se sienten dejados de lado, como Rusia, que estuvo incluida hasta 2014, cuando invadió la península de Crimea, en Ucrania; actualmente China, la segunda economía del mundo, no termina de explicarse por qué no está en el grupo.

Con la idea de tener este tipo de conjuntos de naciones, bajo un contexto menos rígido para la pertenencia, se integraron otros, como la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) (hasta hace poco dirigida por el mexicano José Ángel Gurría) y el Grupo de los 20 (G20), perteneciendo México a ambos que a su vez son considerados “grupos de los ricos”.

Además, se han creado grupos regionales, entre los que México pertenece a los que involucran a la región del Pacífico, pero también a los continentales, como lo relativo a las Cumbres Iberoamericanas (América Latina más España) y la Cumbre de las Américas, que este año se llevará a cabo el próximo mes de junio, en la ciudad de Los Ángeles, California, en Estados Unidos.

Siendo Estados Unidos la nación anfitriona del encuentro, prácticamente se había dado como un hecho que excluiría de la lista de invitados, a las naciones que se han constituido como lo que Washington interpreta como dictaduras socialistas, que es el caso de Cuba, Venezuela y Nicaragua.

Se trata de tres países con los que México ha tenido casi por tradición diplomática, una buena relación, misma que se ha fortalecido, ahora que está en el poder un partido identificado con la izquierda.

Por ello, desde la Presidencia de la República, hubo un airado reclamo al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, pidiendo que no se hagan excepciones y se invite a todas las naciones del continente, algo que, por una parte, el Departamento de Estado, se negó a hacer, mientras que la vocería presidencial, optó por simplemente decir que no se han enviado invitaciones todavía.

Por ahora, el mandatario mexicano, ha amagado con dejar de asistir a la Cumbre de las Américas, si persiste la negativa de invitar a las tres naciones mencionadas, aunque la historia, no deja bien parada la participación de los gobernantes de éstas en previas cumbres.

Al respecto existe el recuerdo de la reunión hecha en Buenos Aires, Argentina, en 2005, cuando el entonces presidente de Venezuela, Hugo Chávez, arremetió contra el Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA), que se impulsaba en ese entonces, exclamando: “ALCA, ALCA, ¡al carajo!


*: Diputada Federal por Durango

yolanda.delatorre@diputados.gob.mx

FB: YolandaDeLaTorreV

Tw: @yoladelatorre


Una parte importante de los procesos de globalización impulsados por la humanidad, a lo largo de las décadas recientes, ha sido la organización de reuniones cumbre, que han ubicado en un solo lugar a los mandatarios de diferentes países, de acuerdo a los intereses que tienen en común.

Dentro de este marco, una de las cumbres más célebres es la que aglutina a los gobernantes de las naciones más industrializadas del mundo, en este caso me refiero al llamado ‘Grupo de los Siete’ (G7), integrado por Estados Unidos, Canadá, Japón, Reino Unido, Italia, Francia y Canadá. Lo referente a las naciones pertenecientes a esta agrupación, ha sido motivo de controversia, por los países que se sienten dejados de lado, como Rusia, que estuvo incluida hasta 2014, cuando invadió la península de Crimea, en Ucrania; actualmente China, la segunda economía del mundo, no termina de explicarse por qué no está en el grupo.

Con la idea de tener este tipo de conjuntos de naciones, bajo un contexto menos rígido para la pertenencia, se integraron otros, como la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) (hasta hace poco dirigida por el mexicano José Ángel Gurría) y el Grupo de los 20 (G20), perteneciendo México a ambos que a su vez son considerados “grupos de los ricos”.

Además, se han creado grupos regionales, entre los que México pertenece a los que involucran a la región del Pacífico, pero también a los continentales, como lo relativo a las Cumbres Iberoamericanas (América Latina más España) y la Cumbre de las Américas, que este año se llevará a cabo el próximo mes de junio, en la ciudad de Los Ángeles, California, en Estados Unidos.

Siendo Estados Unidos la nación anfitriona del encuentro, prácticamente se había dado como un hecho que excluiría de la lista de invitados, a las naciones que se han constituido como lo que Washington interpreta como dictaduras socialistas, que es el caso de Cuba, Venezuela y Nicaragua.

Se trata de tres países con los que México ha tenido casi por tradición diplomática, una buena relación, misma que se ha fortalecido, ahora que está en el poder un partido identificado con la izquierda.

Por ello, desde la Presidencia de la República, hubo un airado reclamo al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, pidiendo que no se hagan excepciones y se invite a todas las naciones del continente, algo que, por una parte, el Departamento de Estado, se negó a hacer, mientras que la vocería presidencial, optó por simplemente decir que no se han enviado invitaciones todavía.

Por ahora, el mandatario mexicano, ha amagado con dejar de asistir a la Cumbre de las Américas, si persiste la negativa de invitar a las tres naciones mencionadas, aunque la historia, no deja bien parada la participación de los gobernantes de éstas en previas cumbres.

Al respecto existe el recuerdo de la reunión hecha en Buenos Aires, Argentina, en 2005, cuando el entonces presidente de Venezuela, Hugo Chávez, arremetió contra el Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA), que se impulsaba en ese entonces, exclamando: “ALCA, ALCA, ¡al carajo!


*: Diputada Federal por Durango

yolanda.delatorre@diputados.gob.mx

FB: YolandaDeLaTorreV

Tw: @yoladelatorre