Una de las leyendas más emblemáticas y antiguas de México tendrá una representación artística, el mito de los volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl será reencarnado en la obra de ballet “Amor Eterno, la leyenda”, organizado por el Centro Nacional de las Artes (CENART).
El CENART dio a conocer que habrá una representación de ballet de la leyenda mexica que cuenta una versión de la trágica historia del Popocatépetl e Iztaccíhuatl.
En dicha versión, se narra que durante la celebración de la ceremonia de las flores, la cual es dedicada al dios Xochipili, Yaotzin, el príncipe Tlaxcalteca, la interrumpió para solicitarle a Tezozómoc una tregua, a la cual él accede, invitándolo a presenciar la ceremonia, donde su hija Iztaccíhuatl baila.
Al verla bailar, Yaotzin decide raptarla, por lo que, Tezozómoc manda a Popocatépetl a rescatarla, lo que terminó en una lucha a muerte entre ambos, donde accidentalmente Iztaccíhuatl es apuñalada y herida gravemente. Al llegar Tezozómoc, su hija perece en brazos.
El ballet de Iztaccíhuatl y Popocatépetl estará disponible el próximo 4 de abril a las 19:00 horas en el Teatro Raúl Flores Canelo en Country Club Churubusco, Coyoacán, 04210 Ciudad de México, CDMX.
Los boletos se encuentran en el sitio web del CENART, los cuales tienen un precio de $174 pesos. Cabe mencionar que se aclara que menores de 6 años no podrán ingresar a la obra.
¿Cuál es la otra versión de Iztaccíhuatl y Popocatépetl?
El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), explica que la leyenda "de la mujer dormida" narra que Iztaccíhuatl era una princesa que se enamoró de un guerrero conocido como Popocatépetl, el cual estaba servicio de su padre y era su mejor soldado.
No obstante, el padre de Iztaccíhuatl se entera que hay un amorío entre su hija y su mejor guerrero, por lo que éste manda a Popocatépetl a la guerra con la promesa de que si vencía a los enemigos se podría casar con su hija.
Popocatépetl logró el cometido y regresaba con el anhelo de casarse con Iztaccíhuatl, pero al llegar, se encontró con que su amada había fallecido. De esta manera decidió llevar su cuerpo a los montes e implorar a los dioses, quienes al ver su sufrimiento, decidieron convertir a Iztaccíhuatl en un volcán inactivo, mientras que a Popocatépetl se convritió en uno activo que cuidaría a lo largo de los siglos a su amada.
