La fachada del Teatro de la Ciudad de México Esperanza Iris, será intervenida para darle mantenimiento y reconstruir algunas zonas dañadas por el sismo de 2017; los trabajos se realizan dentro de un programa de conservación del edificio con 103 años de antigüedad, declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad desde 1987.
Ángel Ancona, director general del Sistema de Teatros de la Ciudad de México, detalló que la fachada tuvo un daño grave en 1996 además presenta desgaste permanente por la lluvia y el excremento de las palomas que deterioran la piedra original; a ello se suma fisuras derivadas del sismo de 2017.
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“Desde el pasado jueves 4 de febrero comenzó la colocación de los andamios y a partir del lunes 8 dieron inicio las obras de restauración para lograr un acto de reinauguración de la fachada justamente en su 103 aniversario, el próximo 25 de mayo”, precisó a través de un comunicado.
El origen del espacio, recordó el director, radica en la diva de la opereta, Esperanza Iris, quien encargó a los arquitectos Federico Mariscal e Ignacio Capetillo “un teatro lo más parecido a La Escala de Milán, y ellos lograron hacer el primer recinto de la capital de herradura a la italiana, con palcos laterales, concebido principalmente para ópera y con su espacio para orquesta y su pendiente en el escenario”.
Por su parte, el arquitecto José Allard Contreras, subdirector de Conservación, Regulación y Mantenimiento de Inmuebles de la Secretaría de Cultura capitalina, informó que la remodelación estará a cargo de la empresa CAV Diseño e Ingeniería, la cual trabajará el suministro y colocación de malla para la protección de la fachada principal y la limpieza química en la fachada para después atender grietas, fisuras y separaciones.
Allard precisó que el desgaste natural del tiempo se sumó a los daños ocasionados por el sismo de 2017 que aflojó y rompió diversas piezas sueltas de la fachada. Recordó que el inmueble fue intervenido en 2019 con un mantenimiento preventivo de impermeabilización y no se había realizado ninguna intervención hasta ahora.
Las obras de restauración se trabajan de manera conjunta con el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), quienes supervisan las tareas realizadas.
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