Por MARÍA ESTHER BELTRÁN MARTÍNEZ
Málaga, sexta ciudad más poblada de España, Capital de la Costa del Sol, bañada por el Mediterráneo y perteneciente a la comunidad de Andalucía.
Uno de sus barrios es el de la Victoria, que se conformó en el siglo XVI extramuros de la ciudad musulmana en los alrededores de la puerta de Granada. Que conducía a la capital del reino nazarí.
El nombre de la Victoria lo adopta por el convento de frailes mínimos fundado sobre el lugar en el que estuvo el campamento del rey Fernando el Católico, durante el asedio de la ciudad en 1487.
Víctor Heredia, historiador indica que los Reyes Católicos donan una imagen de la Virgen que les había regalado el emperador del sacro imperio Maximiliano I de Habsburgo a la que le dio advocación de la Victoria y que fue venerada como patrona de la ciudad recién conquistada. Santa María de la Victoria es Patrona Principal de la Ciudad de Málaga y de la Diócesis de Málaga desde el 12 de diciembre de 1867. El día ocho de septiembre se celebra una procesión de la imagen de su templo hasta la catedral que se encuentra en el centro de la ciudad de Málaga.
En la actualidad la iglesia de la victoria es un templo parroquial y el antiguo convento de los mínimos es un moderno hospital privado. UNA CRIPTA ÚNICA EN ESPAÑA
En el interior del santuario se encuentra el panteón o cripta decorados con yesería, porque en Málaga no se disponía ni de mármol, ni de tiempo o dinero para importarlo. La escasa altura de la estancia, apenas tres metros, y el suelo a cuadros blancos y negros. Para algunos historiadores, la cripta es la transposición arquitectónica de las “danzas de la muerte”, un género literario muy popular a finales de la Edad Media. No existen muchos monumentos funerarios tan lúgubres como éste.
Para sorpresa de cualquier mexicano puede ver calaveras en distintas posiciones que nos remontan al Día de Muertos de nuestra cultura. La temática es fúnebre. En el centro se encuentran las estatuas orantes de los primeros condes de Buenavista, José Guerrero y Antonia Zapata y Coronado que sufragaron la reconstrucción de todo el templo. El conde ideó una capilla en el trasaltar de la mayor, con su panteón en el nivel inferior y un camarín para la patrona de Málaga, en el superior. El resultado de esta solución reforzó el prestigio social del condado.
El conjunto de cripta dominada por representaciones de la muerte y símbolos mortuorios inspirada en los ejercicios espirituales de San Ignacio de Loyola, siendo calificado de pieza clave del barroco andaluz es obra del maestro Felipe de Unzurrunzaga.
El artista realizó esculturas tanto de adultos como de niños mujeres y hombres que se enfrentan a la muerte sin importar su condición social. Además de ver el paso de la muerte.
Nos encontramos en un espacio reducido a nuestro alrededor vemos calaveras y en cada detalle enseña que la muerte llega tarde o temprano, resalta que su gran aliado es el tiempo.
Para muchos visitantes la experiencia puede ser desagradable; sin embargo, es una muestra de la teología que manejaban en su tiempo que era resaltar que: Nada importaba en la vida que cuidar el alma qué era lo que realmente sobrevive a la muerte.
Dos colores son los que imperan en la cripta el blanco y el negro la base es el negro y las esculturas de yeso en blanco existen símbolos en cada centímetro de lugar. Vemos relojes y globos terráqueos qué son los bancos de la misma muerte. En una esquina muy escondido se encuentra una imagen diabólica. Se encuentra en la salida donde se ubica una escalera que nos lleva al camarín de la Virgen. Es una apología de ir de la muerte al cielo.
La cripta de la Basílica de la Victoria, sin duda, es un tesoro escondido. El estilo barroco que tiene en su cripta la seguiremos viendo en el camarín. Para visitarla se tiene que hacer una cita previa. https://www.youtube.com/watch?v=zYx-PX77MtA