Austria, una potencia de los deportes de invierno, no excluye renunciar a los Juegos Olímpicos de Pyeongchang 2018, en Corea del Sur, si la tensión con su vecina Corea del Norte aumenta, afirmó este lunes el presidente del Comité Olímpico Austríaco, Karl Stoss, mientras que el COI pidió calma.
"La seguridad de los atletas y su bienestar son evidentemente la preocupación principal del COI", aseguró el Comité Olímpico Internacional.
"Hemos estado en contacto con los jefes de gobierno implicados y las Naciones Unidas durante estos últimos meses y nadie, sin discusión, ha expresado dudas sobre los Juegos Olímpicos de invierno 2018", añadió el COI.
Antes, Stoss declaró a la agencia austríaca APA: "Si la situación se degrada y la seguridad de nuestros deportistas no está garantizada, no iremos a Corea del Sur".
"No consideramos sin embargo, que vayamos a llegar a eso", añadió Stoss, subrayando que no existe un 'plan B' en caso de anulación de los Juegos de invierno, programados del 9 al 25 de febrero en Pyeongchang, a 80 kilómetros de la frontera con Corea del Norte.
El jueves, la ministra francesa de Deportes, Laura Flessel, aseguró que "el equipo de Francia se quedaría" en su país en caso de una degradación de la situación política.
Este viernes, el Ministerio del Interior de Alemania dijo a la agencia SID, filial de la AFP, que en su caso se tomaría una decisión "en el momento oportuno".
La tensión en la península coreana se ha reavivado debido a recientes ensayos nucleares y a los lanzamientos de misiles efectuados por Pyongyang.