Si comparamos la primera minivan, la cual salió de la línea de producción de la planta de Windsor en Canadá, el 2 de noviembre de 1983, con su más reciente modelo, es evidente la inmensa evolución que ha tenido el modelo en cuanto diseño y tecnologías; sin embargo, la fórmula que convirtió a la Caravan en un éxito en ventas sigue intacta.
Nos referimos a que se trata de una camioneta cuyo objetivo es ofrecer no sólo un mayor espacio interior para los ocupantes, sino que además, lo hace con un confort superior y de manera segura, pero ahora recurriendo a los recientes desarrollos de la firma estadounidense.
Por fuera, la Chrysler Pacífica luce imponente, pero al mismo tiempo elegante y sofisticada, con una carrocería de 5.17 metros de largo, 2.29 de ancho y 1.77 de alto que presume de un diseño estilizado, filado y moderno, la cual además permite acomodar hasta siete u ocho pasajeros en sus tres filas de asientos.
Presionamos el interruptor para abrir de manera eléctrica la puerta corrediza izquierda y nos internamos en un mundo de lujo y confort, en el que destacan, de primera mano, la comodidad y versatilidad de los asientos, los cuales se pueden configurar dependiendo de nuestras necesidades de espacio, y pasar de los 915 litros disponibles en la cajuela con todas las filas de asientos habilitadas, hasta ganar un aumento de 3,978 litros al abatirlas, ideal para trasladar objetos de gran tamaño.
En segundo lugar, llaman la atención las dos pantallas táctiles a color de 10 pulgadas en las que se pueden reproducir los juegos que tiene integrados o reproducir un DVD.
Una camioneta con tantas virtudes no se puede desaprovechar, de modo que trazamos una ruta un tanto improvisada con toda la familia para disfrutarla al máximo, partiendo desde la Ciudad de México para visitar Hidalgo y finalmente concluir en Morelos.
Con los ocho invitados y sus maletas en su lugar iniciamos nuestra travesía. Lo primero que brilla de la Pacífica es su extraordinaria calidad de marcha, pues la suspensión no permite que ninguna irregularidad se filtre al habitáculo y su equilibrio en carretera es digno de presumir.
A continuación, está el tren motriz, conformado por un motor V6 atmosférico de 3.6 litros el cual genera 287 caballos de fuerza y 262 libras-pie de torque a las ruedas delanteras, cifras que resultan muy solventes para mover no sólo las cerca de dos toneladas que pesa esta minivan, sino el peso adicional de nuestros acompañantes y sus pertenencias.
Teníamos ciertas dudas sobre la respuesta del motor, sobre todo al rebasar en los ascensos pronunciados de la carretera secundaria que pasa por los Prismas Basálticos, en Hidalgo. Nada que temer, pues el motor se apoya en una sofisticada transmisión de nueve velocidades la cual inserta la marcha adecuada para avivar la respuesta del motor o para mantenerlo trabajando muy relajado por debajo de las 2,500 rpm a una velocidad constante de 120 km/h.
Tan importante es el desempeño del motor como el del sistema de frenos, pues con todo el peso adicional que llevamos se requiere que su reacción sea inmediata al toque del pedal, y que en el caso de la Pacífica no mostraron síntomas de agotamiento.
Con todo, esperábamos que el consumo de combustible se disparara, sin embargo, nos sorprendió que logramos mantener cifras combinadas superiores a los 12 km/l.
Al final de nuestro recorrido nos costó trabajo despedirnos de la Pacífica, pues por cerca de 400 kilómetros se convirtió en un miembro más de la familia.
FICHA TÉCNICA
- Motor 3.6L Pentastar
- Potencia 287 HP
- Torque 262 LB-PIE
- Transmisión Automática 9 vel.
PRECIOS Y VERSIONES
- Limited Plus $827,900
- Limted Platinum $1,014,900
Destacados
- 100 características de seguridad activa y pasiva
- 7 años de garantía o 100,000 kilómetros en tren motriz.
- 7 años de auxilio vial.
- 7 años de Intersafe que ampara el robo de partes y piezas interiores.
.jpg "Terapias de conversión (1).jpg")
.jpg "Diseño sin título (4).jpg")